¿Cuál es la mejor madera para camperizar?

Los materiales que se pueden usar en una furgoneta camper son casi infinitos, pero la madera es la favorita de todos los camperizadores por muchos motivos. Ahora bien ¿cuál es la mejor madera para camperizar? Hay diversos tipos y cada una tiene sus ventajas e inconvenientes, así que vamos a verlos para identificar qué elección es la óptima para tu furgoneta camper.

Hay que tener en cuenta aspectos como el precio, la capacidad de resistencia a la humedad, el peso de la madera o su resistencia al movimiento y a los tornillos. En función de todo esto, que es lo que vamos a revisar, sabremos qué madera es mejor para camperizar en cada caso y según nuestras circunstancias particulares.

Los mejores tipos de madera para camperizar

Aunque son baratos, los tableros de aglomerado son pesados -demasiado para una camperización- y además resisten mal a la humedad. Por otro lado, también resisten mal al movimiento y los tornillos podrían moverse, mientras que un tablero de aglomerado hidrófugo tiene todas estas mismas desventajas, pero siendo resistente al agua y manteniéndose muy económico.

El siguiente paso sería un tablero de fibra o DM, que es algo mejor, pero sigue siendo pesado, poco resistente a la humedad y poco resistente al movimiento. Un tablero de DM hidrófugo, de nuevo, tiene idénticas desventajas, pero sí que tiene una buena resistencia al agua y, por tanto, sería más interesante para la construcción de muebles en nuestra camper.

Mejor que las anteriores sería la madera OSB. Ya es más resistente al movimiento, sigue teniendo un precio económico y, eso sí, se deforma con la humedad. Por eso, la mejor madera para camperizar, de entre todas, es el contrachapado. No obstante, hay varios tipos de contrachapado disponibles en el mercado, y algunos son mejores que otros para nuestra camper.

La mejor madera para camperizar es el contrachapado, pero ¿cuál elegir?

El ideal es comprar contrachapado marino. Es la más cara, pero la mejor madera para camperizar sin ningún tipo de duda. Es la madera más resistente al agua, los tornillos se sujetan de la mejor manera posible y sin problemas con el movimiento, pesa relativamente poco y, eso sí, los tableros son bastante caros. Pero lo cierto es que este tipo de madera merece la pena por sus propiedades.

No obstante, maderas como el contrachapado de pino, el de abedul, el de okumen o el de chopo se utilizan con frecuencia en las camperizaciones porque, a pesar de una resistencia al agua y la humedad algo inferior, su peso es muy reducido y tienen el resto de ventajas del contrachapado marino. El motivo por el que se opta por estas alternativas es, sencillamente, porque son maderas más baratas y más fáciles de conseguir.

A partir de elegir nuestra madera para camperizar, lo siguiente podría ser elegir el acabado o el grosor. Respecto a esto segundo hay que tener en cuenta que nos interesa un peso reducido a la vez que una madera que reste el menor espacio posible, pero que también tenga resistencia. Y para el acabado, queda a nuestra elección pero suele optarse por tableros con melanina o estratificados, mientras que en los suelos se utiliza a menudo el vinilo.