Alonso no usará el KERS ni en Singapur ni en Japón

Después de 4 meses sin usar el sistema acumulador de energía, el equipo Renault volvió a montar el KERS con motivo del Gran Premio de Italia en Monza el pasado fin de semana.

Desde que decidieron quitar el sistema, ya que no se adaptaba lo suficientemente bien al monoplaza, no han vuelto a trabajar en él. Y es que no lograron encontrar un reparto de pesos adecuado en el R29; con el centro de gravedad demasiado elevado, (unos 4 cm por encima del deseado) debido a la ubicación del depósito de combustible y de las baterías, el fracaso estaba escrito de antemano.

Como no contaban con el suficiente margen para colocar lastre delante, el coche no frenaba bien y subviraba demasiado. No eran competitivos, con lo que optaron por apartar el sistema para seguir desarrollando la aerodinámica en torno al doble difusor, el cual se estrenó por vez primera en el Gran Premio de Barhein, siendo el equipo de Fernando Alonso, el primero de los equipos "legales" en adaptar su bólido a un doble difusor, el cual le permitiría aumentar el downforce de forma considerable. Otros equipos, como Mclaren y Ferrari, sí que lograron una optimización del sistema KERS, pero para ello, y dado que tampoco podían acercar el centro de gravedad a las ruedas delanteras, lo pudieron solventar acercando el centro de gravedad, recortando la distancia entre ejes, con lo cual, el eje delantero se retrasaba 7,5 cm; y conseguir, de ese modo, cargar más las ruedas delanteras. Para ello fabricaron un chasis B, cosa que Renault no hizo.

Para Monza, por lo tanto, el equipo Renault no cambió las baterías de sitio ni adelantó el centro de gravedad , simplemente se aprovecharon de la potencia extra del sistema, que en Monza les daría décimas importantes para poder escalar posiciones.

Ciertamente, en el lapso de tiempo entre Montmeló y Monza, llegaron las mejoras en Renault, pero la suerte no estuvo de parte de Fernando. Una rueda mal puesta, un toque en la salida que inutilizó el tapacubos dejándolo seriamente dañado, una lluvia inesperada en la Q3... fueron factores que impidieron a Fernando lograr los puntos tan ansiados durante las últimas carreras.

Llegaron a Monza con la esperanza de sacarle el máximo partido al sistema KERS y aprovecharse de esa potencia extra que en la cuna de la velocidad, sería un handicap importante para efectuar adelantamientos, calificar bien y hacer una buena salida. Pero la teoría se quedó sobre el papel.

Ya que, a pesar de las previsiones de Renault, Alonso no se mostró demasiado conforme con el retorno del sistema. Tuvo una mala salida, que le hizo retroceder varias posiciones, no obstante, gracias al KERS y a las manos del asturiano, logró adelantar a varios pilotos. Sin pestañear, adelantó a Vettel con el Red Bull, y con la ayuda del KERS y el toque especial de Alonso, logró adelantar a Kovalainen con un mejor coche que el Renault. Logró llegar 5º a meta, igualando así su mejor resultado de la temporada por tercera vez, siendo la primera en Australia, quedando ya muy lejos en el tiempo, y casualmente, la última hasta Monza, en el GP de España, última vez donde hasta el pasado fin de semana utilizó el KERS.

Después de la carrera, le preguntaron acerca de la utilidad del KERS en Monza: "Lo pusimos con el único objetivo de la salida y no adelanté a nadie, pero si no llego a darle al KERS habría llegado último a la primera curva. Y luego adelanté a Vettel y a Kovalainen también gracias al botoncito. Sirvió, pero sabemos que es un lastre llevar todo el peso en el centro del coche, eleva el centro de gravedad y a una vuelta o en ritmo de carrera el monoplaza es más rápido sin él"

Con su estrategia a una sola parada, el Renault de Fernando Alonso esperaba hacer un 7.º puesto, y las simulaciones no fallaron del todo. Ya que de no haber sido por la caja de cambios del Force India de Liuzzi, quien brilló después de su retorno a la competición, en sustitución de otro italiano, Giancarlo Fisichella, quien corrió para Ferrari, y del accidente en la última vuelta de Hamilton, que rodaba 3.º e intentaba dar caza a Button, en efecto habría sido 7.º. Si no hubiera tenido una mala salida, quizás le habríamos podido ver un poquito más arriba, incluso el podio no habría sido descartable. "Siempre que se gana una posición te da el subidón y acabas feliz. Aunque también tengo que decir que no es bonito ver cómo otro piloto termina contra el muro".

Por último, añadió: "En Singapur no lo pondremos ni en Suzuka tampoco. Brasil podría ser la próxima estación."