Pretemporada F1 2018Día 6: análisis técnico de los test de F1 en Barcelona

A medida que se suceden las jornadas de test, los equipos van implementando progresivamente nuevos elementos en sus monoplazas. Algunos de ellos buscan solucionar problemas de diferente índole y otros ganar rendimiento, pero tampoco faltan los aditamentos algo alocados que sirven de experimento en busca de abrir nuevas vías de desarrollo.

Toro Rosso y la búsqueda de carga

El equipo italiano no se está limitando a disfrutar del buen rendimiento que está demostrando tener el motor Honda, especialmente en lo que a fiabilidad se refiere, y poco a poco va explorando otras vías con las que mejorar la velocidad del SRT13. En esta ocasión se trata de un doble aletín situado encima del escape con vistas a generar carga aerodinámica, pero también ayudar en cierto modo al alerón trasero ordenando el flujo aerodinámico que discurre bajo el plano principal.

Ambos aletines están fijados al soporte del alerón trasero, siendo el primero más alto y largo (1), mientras que el segundo adopta la curvatura del escape (2) y trabaja con el aire caliente que proviene del interior del capó motor.

McLaren sigue pasando calor

A medida que pasan los días, el capó motor del MCL33 va ganando orificios, pero también se muestra cada vez más deteriorado, pues aún no ha sido reemplazado tras los problemas de sobrecalentamiento del primer día de test. La última incorporación es una pieza (3) que canaliza el aire hacia el interior del capó motor en un intento de refrigerar aún más los elementos cercanos.

Por desgracia para McLaren nada de ello ha evitado una fuga de aceite en el monoplaza tras dos horas de test, dejando a Fernando Alonso parado en la curva de La Moreneta y permitiendo a nuestro fotógrafo tomar una instantánea del siempre complejo entramado inferior de piezas aerodinámicas.

En la imagen adjunta podemos ver el recorrido que hace el flujo aerodinámico inferior central, que llega encauzado por el canal creado por los soportes del alerón delantero en dirección a los turning vanes y, finalmente, el splitter, que distribuye el aire hacia los pontones, los bargeboards y la parte inferior del suelo del monoplaza. Se trata de una de las partes más escondidas por los equipos y que raramente queda al descubierto por razones obvias.

El microalerón de Williams

Finalizamos el repaso técnico de las sexta jornada con un elemento fascinante por su tamaño y por ilustrar a la perfección el nivel de obsesión que tienen los diseñadores por encontrar rendimiento en cualquier zona del coche.

En esta ocasión nos detenemos en la estructura trasera de impacto del FW41, en la que se sitúa la luz trasera. Encima de la misma vemos dos aletines (4) que buscan aprovechar los gases del escape para generar carga aerodinámica. El primero de ellos, insertado en la estructura a modo de pestaña, es habitual en todos los equipos, pero el segundo, un microalerón, es sin duda algo novedoso y, incluso, extravagante. Será interesante ver si Williams sigue explotando esta curiosa vía o llega a la conclusión de que su beneficio es marginal y no merece la pena.

Fotos: Motor.es