Análisis técnico del McLaren MCL36: marcando territorio

El nuevo McLaren MCL36 ya esta aquí. Y, como sucediera con Aston Martin y su AMR22, la formación afincada en Woking ha tenido la deferencia de mostrarnos su monoplaza real, aunque obviamente habrá cosas que no podamos ver hasta que comience la pretemporada.

Sea como fuere, ya comenzamos a ver que, si bien el nuevo reglamento técnico no permite innovar tanto como en temporadas anteriores, sigue permitiendo que los equipos interpreten de manera distinta partes relevantes para el rendimiento del coche.

Este año, al menos de momento, esa zona es la de los pontones y el suelo del coche, que McLaren y Aston Martin han interpretado de manera muy distinta. Vamos a ver esto y muchas otras de las cosas que nos ha dejado el nuevo MCL36 con motor Mercedes.

Quitando peso

Si los Fórmula 1 de 2022 tienen un punto débil ese es sin duda el peso, pues ya rozan los 800 kg. a consecuencia del incremento de tamaño de los neumáticos o de seguridad del chasis, entre otras cosas.

A consecuencia de ello, hay que intentar aligerar el coche al máximo y esto pasa por eliminar todo el material prescindible posible. Un ejemplo claro de ello lo vemos en el morro del MCL36, que al igual que el AMR22 opta por una forma muy estrecha (2) y una punta lo más corto posible (1).

Eso, además, permite canalizar todo el flujo aerodinámico posible hacia la parte inferior del suelo y los pontones, ya que este año la clave está en el efecto suelo y en la capacidad de alimentar al máximo el gran difusor de este nuevo coche. De igual modo, el plano principal inferior también está suspendido sobre el superior, tal y como vimos también en el Aston Martin.

También podemos observar los tapacubos aerodinámicos de la rueda delantera (4), aditamentos que vuelven a la Fórmula 1 tras estar prohibidos durante varios años.

Suspensión y pontones

A medida que nos movemos hacia atrás, comenzamos a ver más diferencias con el Aston Martin AMR22, pues el MCL36 adopta una suspensión tipo pull-rod (3) y también unos pontones completamente distintos.

En este caso, McLaren renuncia al undercut de la base del pontón para adoptar una pared completamente recta y unas entradas de aire más alargadas y redondeadas (líneas rosas). Se trata de un diseño menos radical que, posteriormente, tendrá su influencia en las formas de la parte media y final de los mencionados pontones.

También podemos ver un detalle que en realidad no es nuevo, como es el deflector inferior situado en la carcasa de freno (6) y que no vimos en el Aston Martin, pero sí en la maqueta oficial de la Fórmula 1.

El suelo y su canal inferior

La parte central y posterior de este nuevo coche es sin duda clave en su rendimiento, pues el efecto suelo sustituye a los alerones como principales generadores de carga aerodinámica.

En la imagen central de las combinación de tres que tenemos justo encima, vemos como el MCL36 sigue adoptando una filosofía parecida a la de temporadas anteriores, renunciando al canal inferior tan pronunciado (también llamado doble suelo) del AMR22. En este caso el pontón no queda suspendido en el aire, aunque eso no impide que el canal inferior que alimenta al difusor sea claramente visible en la forma del suelo (7).

Este concepto crea más base en el pontón, pero reduce la sección en la parte superior, bajando el centro de gravedad y propiciando que la parte posterior de la tapa motor sea más ancha, para así extraer el aire caliente del interior con efectividad (8). Una solución muy diferente a la de Aston Martin, que optaba por unas rejillas o branquias situadas longitudinalmente en la zona superior del pontón.

A buen seguro nos queda mucho por ver de McLaren una vez que el coche pise la pista por primera vez. No en vano, el equipo ya ha confirmado que en la primera carrera de Bahréin llegará un nuevo paquete aerodinámico. Sin embargo, ya se van viendo cosas que nos permiten vislumbrar disparidad de diseños en algunas zonas. ¿Cuál será la más acertada?

Fotos: McLaren Racing | Motor.es