Los argumentos de Aston Martin para renovar a Stroll evidencian que ser compañero de Fernando Alonso sale muy barato

Aunque en los últimos tiempos Honda ha hecho campaña por Yuki Tsunoda, tras la renovación del japonés con RB quedó claro que no habría cambio alguno en la pareja de pilotos de Aston Martin.

No en vano, el equipo del que Lawrence Stroll es propietario ha sido creado por y para su hijo Lance. Por tanto, es un lastre que Aston Martin tiene asumido y del que no se va a desprender mientras el propio piloto canadiense decida continuar en él.

«Para Lance Stroll es suficiente con ser profesional y trabajar duro. Cuando hablamos de la élite de las élites, es pedir muy poco»

Aunque Mike Krack, Fernando Alonso y Pedro de la Rosa, entre otros, se afanan en defenderle una y otra vez, lo cierto es que los hechos dejan claro que Lance Stroll es un problema para Aston Martin. Y no porque sea un piloto insuficientemente rápido o no trabaje duro, sino porque carece de la cualidad diferencial en todo piloto de Fórmula 1: la consistencia y regularidad.

En un buen día, Lance Stroll es capaz de vencer a (casi) cualquiera, y eso incluye a Fernando Alonso. El problema es que la temporada tiene una duración de 24 grandes premios y esto no suele suceder más de dos o tres veces en toda la temporada.

Mientras, los equipos con los que Aston Martin quiere compararse cuentan con parejas equilibradas y muy competitivas (Sainz y Leclerc, Norris y Piastri, Hamilton y Russell), con la excepción de Red Bull. Y quizá esto último sea más mérito de Max Verstappen que demérito de Checo Pérez.

Por qué Lance Stroll ha renovado dos años más con Aston Martin

La causa real por la que Lance Stroll continúa en Aston Martin es evidente: el equipo ha sido creado para llevarle lo más alto posible en la Fórmula 1.

Pero la versión oficial, la dada por Mike Krack, tampoco deja en muy buen lugar al piloto canadiense. Y es que los resultados son los que son.

El director del equipo Aston Martin señala en primer lugar estar encantado «de confirmar el futuro de Lance con Aston Martin». Además, apunta que el canadiense de 25 años «ha jugado un papel clave en la construcción de este equipo».

«Sus comentarios técnicos, junto con su comprometido trabajo en el simulador, han ayudado a contribuir al desarrollo continuo del coche cada temporada», amplía el ingeniero luxemburgués, destacando así el compromiso de Stroll y su ética de trabajo.

Por otro lado, Mike Krack hace referencia a la importancia de mantener la estabilidad en el equipo de cara a la llegada del nuevo reglamento en 2026. «La consistencia y estabilidad de que tanto Lance como Fernando permanezcan en nuestro equipo es una gran plataforma para continuar haciendo realidad nuestras ambiciones. Esperamos crear más recuerdos increíbles y lograr más éxitos juntos».

Palabras muy típicas de un comunicado de renovación, ciertamente. Pero que encierran una cruel realidad, y es que ser el compañero de Fernando Alonso en Aston Martin sale muy barato.

O, dicho de otro modo, en el caso de Lance Stroll es suficiente con ser profesional y trabajar duro. Y eso, cuando hablamos de la élite de las élites, un equipo ambicioso en el campeonato más exclusivo del planeta y con sólo 20 plazas, es pedir muy poco.

«Estoy muy contento de haberme comprometido con el equipo para 2025 y más adelante», ha expresado Lance Stroll, por su parte. «Es increíble ver lo lejos que hemos llegado en los últimos cinco años. Hemos crecido mucho como equipo y todavía hay mucho más que esperar».

Lo cierto es que es normal que Lance Stroll esté contento y también es justo decir que, en esta historia, el piloto es quien menos responsabilidad tiene. Al fin y al cabo, un piloto debe perseguir su sueño e intentar llegar a lo más alto. Y si alguien le da la oportunidad, no es él quien debe pararse a pensar si es justo o apropiado.

Lo hemos dicho en otras ocasiones: Aston Martin no llegará lo más alto mientras tome decisiones de este tipo, porque siempre estará en desventaja con sus rivales. Pero, por otro lado, esto también demuestra que Lawrence Stroll es padre antes que empresario. Y eso, con el corazón en la mano, no es algo que pueda criticarse tampoco.

Fotos: Aston Martin Racing