Brown apuesta por una reedición del duelo Alonso-Hamilton al frente

Hay duelos que marcan una época, rivalidades que perduran en el tiempo a pesar de que las circunstancias cambien con el paso de los años. La Fórmula 1 ha presenciado, en sus 68 años de historia, numerosas batallas entre compañeros de equipo e incluso pilotos talentosos que representaban a estructuras diferentes que han fomentado el espectáculo en la categoría reina, impulsando un aumento en el número de seguidores.

Fernando Alonso dejó huella en McLaren cuando llegó a Woking en 2007 tras haberse proclamado campeón por segunda vez con Renault, y es que el asturiano se topó con un Lewis Hamilton que le plantó cara en su año debut, algo que derivó en una tensión perjudicial para ambos, que además terminó con el primer y único título mundial para Kimi Räikkönen, al menos hasta la fecha, con la consecuente polémica a posteriori que desencadenó la marcha del #14 del equipo.

“Dos de los mejores pilotos jóvenes del mundo que querían ganar el uno al otro de forma desesperada, y acabó siendo algo poco saludable”. Así describió Zak Brown la situación vivida por los dos talentos de la parrilla en aquel entonces, una encrucijada que “hemos visto eso antes con Senna y Prost o Piquet y Mansell”, enfrentamientos que han contribuido a la popularidad de la Fórmula 1 a día de hoy. “Creo que cuando metes a dos jóvenes leones juntos en una jaula vas a provocar fuegos artificiales”.

Senna y Prost terminaron echándose de la pista; Alonso y Hamilton todavía tenían que demostrar de lo que eran capaces

El director ejecutivo de McLaren reconoció que “a veces puedes gestionarlo”, argumentando que “Mercedes lo logró”, aunque no es nada fácil lidiar con dos personalidades tan antagónicas en un box. La confrontación entre Hamilton y Rosberg fue algo “bastante intenso” que Wolff se vio obligado a atajar con mano izquierda, una enemistad que tuvo sus consecuencias en pista, pero ambos campeonatos quedaron en casa. “Senna y Prost terminaron echándose respectivamente fuera de la pista antes de que Prost dejara el equipo”, recordó Brown, mientras que catalogó la pugna entre Hamilton y Alonso de “incontrolable”, puesto que “todavía tenían que demostrar de lo que eran capaces”.

Reedición del pasado

El Autódromo Hermanos Rodríguez fue el escenario perfecto para que Alonso y Hamilton pelearan de igual a igual con monoplazas muy desiguales en rendimiento.

“Me muero de ganas por verlo, estoy ansioso por ver dónde está cada uno en la próxima temporada”, confesó Brown idealizando con una nueva temporada con Alonso y Hamilton peleando por todo. La esperanza de “ver a Fernando y a Stoffel luchando entre ellos”, así como a “Lewis y Fernando en un buen coche” es el sueño del directivo americano, que confía en volver a la senda del triunfo de la mano de Renault.

“Hicimos alguna clasificación decente el año pasado, pero nuestro ritmo de carrera era aún peor”. El sexto puesto del primer espada de McLaren en el Gran Premio de Hungría fue el mejor resultado de la escudería británica en 2017, una posición encomiable vista la trágica caída de rendimiento que experimentaba el MCL32 del sábado al domingo. “Fernando hizo una buena clasificación en Spa, pero luego en carrera los demás lo tenían muy fácil para pasarle”.

Nuestro ritmo de carrera era aún peor; Fernando hizo una buena clasificación en Spa, pero en carrera era muy fácil pasarle

Por último, Brown destacó el mano a mano que mantuvo Alonso en México con el vigente campeón del mundo, un duelo que considera un adelanto de lo que se avecina. “Qué forcejeo con Lewis, fue genial. Una situación en la que podía apretar porque éramos un poco más competitivos, espero que veamos más batallas así y al frente de la parrilla”, concluyó Brown.

Fuente: Express SportFotos: Red Bull Content Pool