Por qué China será la prueba del algodón para Williams y cómo los neumáticos impiden a Sainz igualar a Albon

Williams ha confirmado los pronósticos y se ha convertido en el equipo revelación de este comienzo de temporada 2025 en la Fórmula 1. El equipo británico ofreció un excelente rendimiento en los test de Baréin, y lo refrendó con sus dos monoplazas en la Q3 de la clasificación y el quinto puesto final de Alexander Albon en la carrera de Albert Park.

Sin embargo, la definitiva prueba para el Williams FW47 va a llegar a partir de esta próxima madrugada en China, donde el Shanghai International Circuit espera a todos los participantes en el Mundial de este año.

«Tengo instalado en mi sistema nervioso una forma de conducir que aún hereda cosas de mis cuatro años en Ferrari»

El circuito de Shanghái, la prueba definitiva

Tras rodar en un circuito de tracción, frenada y curvas lentas como Baréin, y también en uno mucho más fluido y con predominancia de curvas de velocidad media como Albert Park, la Fórmula 1 llega a China.

En el país asiático espera el circuito de Shanghái, que cuenta con una de las rectas más largas del campeonato, pero también con curvas muy largas en las que se pasa mucho tiempo girando y que, por tanto, exigen mucho más a la aerodinámica y los neumáticos.

Esta es la razón por la que Williams afronta el segundo gran premio de la temporada siendo consciente de lo importante que será volver a tener una buena actuación.

«China es uno de los primeros circuitos con este tipo de características, de curvas mucho más largas, mucha carga aerodinámica. Baréin está lleno de horquillas y curvas lentas, aquí es todo curva mucho más estilo Barcelona, con mucha carga aerodinámica, y diferente a Australia también», explica Carlos Sainz a este respecto. «Así que creo que va a ser una primera referencia para dar otro tipo de 'feedback' a los equipos, sobre en qué circuitos va a ir bien su coche y en qué circuitos le costará más».

«En ese sentido va a ser una prueba de fuego para este coche, porque si conseguimos que fuera bien en Baréin, bien en Australia y vaya bien aquí, querrá decir que es un paso adelante y es un coche polivalente. Si aquí nos cuesta y este es un circuito más difícil, querrá decir que hay trabajo por hacer todavía, así que hay que verlo», amplía el piloto español.

Carlos Sainz también destaca la dificultad añadida de tener que afrontar un gran premio con formato Sprint tan pronto y con muchas incógnitas aún por resolver sobre los monoplazas. «Será aún más difícil que Australia porque al ser un fin de semana Sprint sólo tendremos una sesión de entrenamientos libres para familiarizarnos con el coche y la pista».

La asignatura pendiente de Carlos Sainz

Ya en un plano más personal, Carlos Sainz llega a China sabiendo que cuenta con una importante limitación con respecto a su compañero y sus rivales: los neumáticos.

De momento, Sainz no ha sido capaz de sacarle el máximo partido a los compuestos más blandos, algo que le ha lastrado a la hora de conseguir el mejor tiempo posible a una vuelta. De hecho, en la primera clasificación del año, el español fue tres décimas más lento que Alex Albon, lo que le colocó cuatro puestos por detrás en la parrilla.

«Hoy tengo reuniones sobre el tema», ha confirmado Carlos Sainz a su llegada a China este jueves. «Todos hemos tenido dos o tres días para intentar aprender de la clasificación de Australia. Ya tenemos algunas ideas para ver cómo puedo maximizar el rendimiento en la Q3 con neumáticos blandos y un coche más ligero».

Aunque Carlos Sainz obtuvo el mejor tiempo absoluto de la pretemporada, reconoce que siempre fue «rápido con neumáticos medios, pero siempre que ponía blandos me costaba un poco. Así que este es el tipo de cosas en las que me tomo mi tiempo con mis ingenieros para pensar en ideas y probarlas».

«Puede que las probemos este fin de semana, puede que funcionen, puede que no. Ya hemos pasado por eso. Pruebas algo diferente y progresas. Sin test, necesitas probar cosas, y necesitas probarlas en carreras. Bien, han funcionado. Ahora damos el siguiente paso. Se va mejorando a lo largo del año y adaptándose a la situación», explica el nuevo piloto de Williams.

La herencia de Ferrari

Este tipo de problemas son habituales en pilotos inexpertos que empiezan en la Fórmula 1, pero también en aquellos que cambian de equipo, ya que las soluciones que valen para determinados monoplazas no siempre son válidas para otros.

Sainz explica que sus problemas con los neumáticos y el Williams FW47 son «una combinación de varias cosas. Es estilo de pilotaje, porque obviamente, tengo instalado en mi sistema nervioso una forma de conducir que aún hereda cosas de mis cuatro años en Ferrari. Hay cosas que funcionan muy bien con este coche desde el principio y otras que claramente no funcionan».

Pero, ¿cómo solucionar este problema? Sainz responde que «puedes ayudar con la puesta a punto para maximizar posibilidades y ayudar con el equilibrio. Pero hay cosas que sólo se descubren con la experiencia, como la preparación de los neumáticos, cómo reacciona el coche a un menor consumo de combustible, un compuesto más blando, una carcasa más blanda del compuesto».

«Y esto sólo se puede aprender compitiendo. Dices, “vale, ahora sé que el coche hace esto, tengo que anticiparme, tengo que adaptarme”, y esta es la única manera, con experiencia», reitera Carlos Sainz.

El sorprendente rendimiento de Williams

En cualquier caso, el rendimiento de Williams está siendo superior al esperado y Carlos Sainz admite que esperaba una mejoría, pero no de este calibre.

«Si me lo hubieran dicho cuando firmé mi contrato en julio del año pasado, dónde estaba Williams cuando firmé el contrato y dónde está ahora, el equipo ha mejorado mucho y va por buen camino hasta ahora, pero ha sido una grata sorpresa».

«Obviamente, también tenía información sobre el rendimiento y la tuve en cuenta, pero sobre todo la actitud, el buen ambiente en el equipo, el hecho de que todos estén comprometidos con el proyecto y avanzando en la misma dirección, y la gran ilusión que hay. Se puede ver que la gente está muy motivada y decidida para volver a la pista, y el ambiente de trabajo en el que me encuentro es excelente», concluye Sainz.

Williams terminó en la novena y penúltima posición en el campeonato de constructores de 2024 y esperaba subir hasta la séptima este año. Sin embargo, tras la primera carrera se encuentra cuarto y por delante de Ferrari, aunque el objetivo realista será luchar por la quinta con Alpine, Aston Martin y Racing Bulls.

Fotos: Williams Racing