Las claves y los números del quinto título de Mercedes
Las flechas plateadas han vuelto a demostrar su superioridad en la era híbrida una vez más. Ferrari ha mantenido el ritmo en varios momentos del año, pero finalmente ha caído de nuevo. Lewis Hamilton ha demostrado sus habilidades al volante con Valtteri Bottas como escudero.
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Publicado: 12/11/2018 09:30
Lo que comenzase siendo una escudería fundada por Gottlieb Daimler y Karl Benz en Alemania en los años ’30 y debutase allá por 1954 alcanzaría un total de 9 victorias en dos años antes de desaparecer oficialmente: la mayor tragedia del automovilismo deportivo sucedió en la edición de las 24 Horas de Le Mans de 1955, erigiéndose como la razón principal de este abandono del mundo del motor, dejando tras de sí a 83 espectadores fallecidos.
Años más tarde, el equipo Tyrrell fue la primera cadena del eslabón que terminaría derivando en el equipo BAR, formación que perduró de 1999 hasta 2005, momento en el que Honda dio nombre a la estructura hasta que Ross Brawn decidiera comprar todo su entramado por una cantidad simbólica para pasar a denominarlo Brawn GP. 2009 fue el año en el que tocarían la gloria tras varios años a la sombra, cosechando tanto el mundial de pilotos junto a Jenson Button como el de constructores, justo antes de volver a denominarse ‘Mercedes’ y regresar tras 55 años de inactividad como equipo oficial.
Desde 2010 en adelante los de Brackley no han hecho sino crecer, y tras un inicio algo complicado, Lewis Hamilton vio el potencial que escondían las flechas plateadas y se unió a ellos de cara a la campaña de 2013, momento en el que terminarían en segunda posición en constructores por primera y última vez hasta la fecha, puesto que desde 2014 nadie ha sido capaz de bajarles del primer puesto. La temporada 2018 no ha estado exenta de situaciones delicadas para los de la estrella, pero con el piloto británico y Valtteri Bottas a bordo, Mercedes ha sabido añadir un quinto título en sus vitrinas que les eleva aún más en lo más alto como los claros dominadores de la era híbrida de la Fórmula 1.
Sonrisa borrada
La cita inaugural del campeonato fue un claro indicativo de que los comandados por Toto Wolff no iban a estar solos en la lucha por el campeonato: Ferrari iba a hacerse con una victoria que replicaría en Bahréin dos semanas después, pero la escena que daría nombre al fin de semana en tierras australianas se produciría en la rueda de prensa de los tres primeros tras la clasificación. Mercedes disponía de un mapa motor conocido comúnmente como ‘party mode’ que activaban en Q3, aunque Hamilton negó haberlo utilizado en Melbourne. Cuando Sebastian Vettel le preguntó el porqué de haber esperado entonces hasta el último momento para marcar la pole, el de Stevenage respondió que lo hizo para “borrarte esa sonrisa de la cara”.
Sin embargo, la acción iba a traer cola, puesto que las tornas se iban a girar en contra de Hamilton tan sólo un día después, y es que como se dice, los puntos se reparten el domingo. Ferrari haría inútil la pole del inglés gracias a una victoria de Vettel, favoreciendo que los de Maranello comenzasen liderando el Mundial tras el segundo puesto del #44 y el octavo de Bottas, dando la vuelta a lo ocurrido en la tarde del sábado.
Líderes temporalmente
Un nuevo triunfo de Vettel en Sakhir hizo que Ferrari consiguiera dos victorias consecutivas ocho años después, pero en China todo iba a ponerse de cara para Mercedes. A pesar de que Daniel Ricciardo se llevase la victoria en Shanghái, un incidente entre Max Verstappen y el piloto alemán de la Scuderia dejaría dañado su SF71H y provocaría que cayera hasta la octava posición, aupando a los alemanes al liderato por primera vez en el año por tan sólo un punto de diferencia.
La mala fortuna quiso que esta primera posición les durase únicamente un Gran Premio, puesto que Bottas abandonaría en Azerbaiyán a causa de un pinchazo por restos que habían quedado en la pista tras la colisión entre los dos pilotos de Red Bull. La primera victoria en el casillero particular de Hamilton quedaría empañada por este contratiempo, si bien el equipo no tiraría la toalla por este primer revés.
Sin rival en España
El retorno al Circuit de Barcelona-Catalunya después de la pretemporada invernal trajo consigo el primero de los cuatro dobletes de Mercedes, que se sumaría a los de Alemania, Rusia y Japón. El abandono, en esta ocasión, de Kimi Räikkönen después de 25 vueltas volvería a decantar la balanza a favor de la estructura de las flechas plateadas en el campeonato, aunque nuevamente este privilegio se les volvió a escapar con el paso de las carreras.
Mercedes tuvo que esperar hasta el Gran Premio de Francia para conseguir otra victoria: la vuelta del Paul Ricard al calendario se saldó con un primer puesto de Hamilton después de un toque en la primera vuelta entre Vettel y Bottas que facilitaría la vida a su compañero de equipo hasta la bandera a cuadros, aunque lo peor estaba por llegar para ellos.
Primer ‘0’ de la temporada
13 vueltas duró Bottas en carrera por las 62 de Hamilton en un fin de semana nefasto para Mercedes. Los dos pilotos de la formación de Brackley engrosaron la larga lista de abandonos en territorio Red Bull, la cual llegó a admitir hasta a seis damnificados, hecho que aprovecharon en Ferrari para quitarles 33 puntos que les servirían para recuperar el liderato que perdieron en Barcelona.
Para colmo de males, la historia de Australia se volvió a repetir poco después, pero con un agravante para Hamilton. Gran Bretaña, la cita local para el de Mercedes, vería cómo éste marcaba la pole para deleite de su afición, pero el día de carrera se convertiría en una pesadilla para Hamilton, quien no pudo hacer nada frente a Vettel desde que Räikkönen le tocase en la primera vuelta y acabase con sus opciones de victoria.
Nuevo doblete y liderato definitivo
Los infortunios sufridos por Mercedes hasta la fecha en las últimas pruebas se trasformaron en felicidad al comandar la tabla una vez más, salvo que esta vez dicho hito se prolongaría hasta el término del año. Hamilton devolvería la jugada a Vettel en Alemania, GP de casa para el de Ferrari, después de que éste se fuera contra el muro al caer unas gotas sobre Hockenheim y pusiera fin a su carrera no sin pedir perdón al equipo por radio, asumiendo que el error había sido suyo al 100%.
El segundo puesto de Bottas sumado a la victoria de Hamilton tras salir 14º por un fallo hidráulico contribuyeron a que Mercedes elevara el vuelo, una coyuntura que fue a mejor con el triunfo del #44 en Hungría, el quinto en su haber, para marcharse de vacaciones con los deberes hechos. La victoria en Bélgica sería la única de las seis que le quitaría Vettel a Hamilton entre Alemania y Japón, pasando a ser un daño menor a pesar de que el ex de McLaren fuera el dueño de la pole en Spa, mientras que en Italia Hamilton volvió a sacar el Hammer Time a pasear para herir a Ferrari en su casa.
Victoria de equipo
Las órdenes de equipo no iban a faltar en el quinto campeonato del gigante alemán. La segunda pole position de Valtteri Bottas llegaría en el Gran Premio de Rusia, acompañada de un ritmo realmente bueno del piloto finés en carrera que nadie pudo frenar salvo Mercedes.
Desde el muro pidieron al #77 que, a causa de una ampolla preocupante en uno de los neumáticos de su compañero de equipo, dejase pasar a Hamilton para ayudarle a llegar a cruzar la línea de meta resistiendo los constantes envites de Sebastian Vettel por él. Bottas no lo dudó y abrió la puerta en el siguiente tramo de la pista que no perjudicase a ninguno de los dos, y a pesar de que le aseguraran que lo sentían por él, el ex de Williamsrechazó cualquier futura “victoria regalada” que pudiese llegar una vez Hamilton se hiciera con el título.
El primero de los dos títulos
La historia volvió a repetirse un año más, y Lewis Hamilton se proclamó, por segundo año consecutivo, campeón del mundo tras la celebración del Gran Premio de México: el inglés alcanzó a sus 33 años a Juan Manuel Fangio como pentacampeón en Fórmula 1, convirtiéndose así en uno de los tres únicos pilotos en toda la historia de la categoría reina en alcanzar dicha cifra junto a Michael Schumacher (aunque el ‘Káiser’ consiguió dos más después).
Los problemas con la gestión de los neumáticos atormentaron a Mercedes tanto en Estados Unidos como en México, provocando que Ferrari les recortase hasta 23 puntos a falta de dos citas para la conclusión del campeonato. Sin embargo, los de Toto Wolff no bajaron los brazos y dieron por buenas la 4º y la 5º posición de sus pilotos en el Autódromo Hermanos Rodríguez, viéndolo como una minimización de los daños ocasionados por la Scuderia, y continuaron dando el máximo para conseguir su objetivo un año más, el de repetir el título de constructores.
Pentacampeones de la era híbrida
Interlagos fue el escenario perfecto para que Mercedes se hiciese de forma matemática con el primer puesto en el campeonato de constructores, un premio que sirve como recompensa para toda la plantilla de una estructura que ha trabajado de forma intachable y que ha sabido adaptarse perfectamente a los propulsores V6 turbo. Este año ha sido el que más les ha costado reeditar su triunfo, algo que ellos mismos han afirmado ante la amenaza inminente de Ferrari, pero finalmente han vuelto a llevar el trofeo a Brackley.
Esta vez sí, Lewis Hamilton pudo subir al cajón más alto del podio para celebrar por todo lo alto el quinto triunfo consecutivo en constructores de Mercedes. Mientras que Bottas sólo pudo ser quinto, el británico exprimió su W09 al máximo para llevarlo a la primera posición tras un encontronazo entre Max Verstappen y Esteban Ocon que acabó con el de Red Bull trompeado, al tanto que Ferrari se hundió en carrera y no fue capaz de restar esos trece puntos que habrían mantenido con vida el campeonato hasta Abu Dhabi.
Estadística | Valor |
---|---|
Victorias | 9 |
Pole position | 12 |
Vueltas rápidas | 9 |
Podios | 23 |
Dobletes | 4 |
Puntos | 585 |
Vueltas en cabeza | 458 |
Kilómetros en cabeza | 2.400 |
Fotos: Movistar F1 | Mercedes AMG F1