Así prepara un equipo de F1 el viaje al GP de Australia

Trasladar a un equipo de un país a otro nunca es fácil, pero resulta especialmente complicado cuando se trata de un viaje de 16.800 kilómetros a lo largo del globo. El desalentador viaje de 24 horas es el más largo del calendario de la Fórmula 1 en 2018, algo que definitivamente lo convierte en un comienzo único para la nueva temporada.

8 min. lectura

Publicado: 19/03/2018 12:30

Dirigirse a la vibrante y bulliciosa ciudad de Melbourne se ha convertido en un viaje tradicional de inicio de temporada para el paddock de la F1. Es uno de los lugares más populares del calendario, lo que hace que el viaje sea un poco más fácil y siempre se combina una sensación vertiginosa de emoción y anticipación.

Pero, aunque es un gran lugar para comenzar la nueva campaña, transportar un equipo de F1 a Melbourne es una tarea gigantesca. En lo que respecta a Mercedes, más de 100 personas de las fábricas de Brackley y Brixworth asistirán a la primera ronda en Australia. Esto implica un número similar de vuelos (que incluyen escalas en Abu Dhabi o Singapur) y una flota de 25 coches que debe ser organizada.

Por supuesto, el circo itinerante de la F1 no solo incluye a las personas. Se necesita una variedad de equipamiento notable para afrontar con garantías un fin de semana de carrera y también está el pequeño detalle de tener que trasladar los nuevos coches de un lado del mundo al otro. Por tanto, son más de 40 toneladas de flete aéreo y 23 toneladas de carga marítima que transportar a Melbourne, desde artículos más básicos como sillas, mesas, paneles para el box y decoración del hospitality, hasta equipamiento complejo como los motores de arranque, el entramado del muro de boxes y lo más intrincado de todo: los dos monoplazas de competición y sus correspondientes repuestos.

Calcula ahora el precio de tu seguro de coche

Calcula tu precio online

Los coches y sus componentes son parte de la carga aérea que partió hacia Melbourne la semana pasada y aterrizó el domingo. Los artículos más pesados, como los neumáticos y las carros de parrilla, son parte del transporte marítimo, que obviamente tiene un cronograma completamente diferente. Hay diferentes tipos de transporte marítimo, por lo que pueden enviarse a lugares de todo el mundo al mismo tiempo. Cada carrera requiere tres contenedores de 12 metros de carga marítima, que comenzaron a viajar para Australia a mediados de enero y que llegaron el viernes anterior a la semana de Gran Premio.

“Un equipo de montaje esperaba en Melbourne y comenzó a descargar toda la carga marítima, el equipo pesado y los paneles del garaje cuando llegaron el viernes”, explica Mark Shepherd, líder del equipo de carga de Mercedes AMG F1. “Construyeron el caparazón del garaje durante el fin de semana y luego, cuando todo el transporte aéreo llegó a su destino, el equipo de carreras y los técnicos del box se ocuparon de descargarlo y de completar el resto del garaje con los coches, sus piezas, repuestos y el resto de equipamiento”.

Para los diferentes departamentos, gestionar el transporte de los miembros del equipo y la carga a Australia es igual que para cualquier otra carrera, aparte del hecho de que lleva más tiempo para que todo y todos lleguen allí. Como dice Mark, todas las carreras “tienen su propia idiosincrasia, pero es un proceso similar en cualquier lugar del mundo al que se viaje”. Sin embargo, los viajes de larga distancia se cobran su precio en el cuerpo humano. Por lo tanto, la preparación detallada es vital. Aquellos que hacen el viaje de un día a Melbourne tienen que estar en la mejor forma, porque no adaptarse al asombroso cambio de zona horaria de 11 horas puede afectar el rendimiento de un equipo de carreras altamente cualificado.

Por cada hora de diferencia de tiempo, hay un retraso de 24 horas para adaptarse a esa nueva ubicación

Hay una serie de tácticas y técnicas que se pueden implementar para que eso no suceda. Por cada hora de diferencia de tiempo, hay un retraso de 24 horas para adaptarse a esa nueva ubicación. Por tanto, para el viaje de Europa a Melbourne, la teoría dice que son necesarios 11 días para acostumbrarse apropiadamente a esa zona horaria si no se hace nada para evitarlo. Los miembros de los equipos tienen un plan de descanso para ayudar a que el reloj de su cuerpo se mueva hacia la nueva zona horaria. Algunos comenzarán a adaptarse gradualmente en los días previos al vuelo y los miembros del equipo que están en las sedes de los equipos dando apoyo al personal desplazado a Australia, trabajan en el horario de Melbourne y también tienen su propio ajuste planificado.

Para rendir al máximo, es necesario vencer el jet-lag de manera eficiente y calculada.

Los vuelos a Australia se escogen para que encajen de la mejor manera posible en los planes de descanso. Obviamente, el escenario perfecto no es siempre posible, pero la idea es que puedan comenzar a adaptarse a la hora de Melbourne en el vuelo: dormir y comer al mismo tiempo que en su destino. Se recomienda tomar una comida ligera en el vuelo y mantenerse bien hidratado. Cuando se ha aterrizado, la exposición a la luz y a la oscuridad también es algo que debe tenerse en cuenta, al igual que las comidas, los horarios de las comidas y la cantidad de ejercicio.

Por supuesto, los pilotos también siguen estos planes y los llevan a un nivel superior para estar lo más preparados posible durante las siete horas de pilotaje intenso que les esperan. Únicamente completarán un ejercicio liviano, ya que ayuda a acelerar el proceso de aclimatación y todo el entrenamiento necesario ya se ha completado antes de poner un pie en el avión.

La gente afronta con un estado de ánimo más positivo y ansioso la primera carrera

Comenzar la temporada con el Gran Premio de Australia significa que todos se sienten más frescos y con más energía en comparación con la fatiga gradual que se establece a medida que avanza el calendario durante los nueve meses de competición. Incluso aunque la presentación del nuevo monoplaza y los test del mismo en el período previo a Melbourne son momentos de gran intensidad, la gente afronta con un estado de ánimo más positivo y ansioso la primera carrera, queriendo volver competir de nuevo. No queda ya mucho tiempo de espera.

Fuente: Mercedes AMG F1Fotos: Mercedes AMG F1

Pixel