Técnica F1Día 5: análisis técnico de los test de Fórmula 1

Se suele decir que los monoplazas que comienzan los test no se parecen en nada a los que compiten en el primer Gran Premio de la temporada. Si bien es una frase un tanto exagerada, pues el concepto y filosofía del coche se define claramente desde el principio, es cierto que varias zonas van sufriendo modificaciones de manera progresiva.

Es el caso del Mercedes W08, que en la jornada inaugural de esta semana definitiva de entrenamientos de pretemporada vio cómo se le introducían numerosos cambios. Comenzando con el alerón delantero, podemos observar un sutil cambio en el deflector vertical (1), que ahora está abierto y dividido en dos partes en su zona más ancha. Este tipo de modificaciones se realizan a raíz de un estudio más profundo del flujo aerodinámico con mirar a redireccionar el mismo de un modo más eficaz alrededor del neumático, conductos de refrigeración de los frenos (también modificados) y los brazos de suspensión.

Pero el cambio más llamativo fue la introducción de una nueva versión del conjunto aleta de tiburón/T-Wing (2), que prescinde de la abertura de refrigeración y se adapta a las necesidades del T-Wing para conseguir mayor eficiencia en el alerón trasero y, de paso, generar algo de carga aerodinámica.

Ya en la zona de los pontones, Mercedes ha realizado varios cambios en ese complejo entramado de aletines y deflectores que rodean a la toma de aire. La base del deflector lateral delantero (3) cambia por completo para adelantarse unos centímetros, mientras que la parte más adelantada del suelo (4) también varía su forma, pasando de un sólo apéndice a cuatro individuales.

Además, el pontón en sí modifica su forma en las inmediaciones del cockpit (6) para ganar volumen y adoptar una ligera curvatura interior. Lo que no cambia a pesar de dicha variación es el deflector horizontal situado encima del mismo. También hay que destacar que el difusor del monoplaza -que no aparece en las imágenes- ha evolucionado, algo que ha sucedido en varios coches de la parrilla, entre los que se encuentra el McLaren.

El Toro Rosso STR12 ha introducido un pequeño cambio en el morro, pues ha añadido una pequeña hendidura a cada lado, perdiendo así su forma uniforme con la intención de mejorar el flujo aerodinámico resultante al impactar con el mismo.

Sauber tampoco se ha quedado atrás y, además de evolucionar el difusor, ha introducido unos nuevos bargeboards (2) en combinación con la eliminación de una de las pestañas (1) situadas delante del deflector lateral.

Terminando con Ferrari, merece la pena destacar, por un lado el nuevo Monkey Seat (1) de tres planos en lugar de dos y, por otro, el complejo trabajo realizado en la unión del difusor con el alerón trasero (2-flecha azul) y los extremos del propio difusor trabajados hasta la extenuación (2-flechas rojas). Sin duda esta es una zona crucial para generar carga aerodinámica y Ferrari ha empleado muchas horas en ella para intentar dar un paso adelante esta temporada.