El automovilismo brasileño sigue en vilo, y con el susto en el cuerpo, tras el erróneo anuncio de la muerte del ex piloto Tuka Rocha tras un accidente de aviación, en un día en el que la Fórmula 1 transcurre por sus tierras para llevar a cabo una sesión de clasificación que se plantea muy intrigante. Aunque ya no haya nada que pelear en cuanto a títulos, Lewis Hamilton no parece querer levantar el pie del acelerador, y su mejor tiempo en los últimos libres le postula para una pole que se le resiste desde Alemania. Muy cerca, Max Verstappen marca los tiempos, a la espera de una ventana para la segunda pole que se arrebató a sí mismo en México.
Ferrari, no obstante, destacó de forma notable ayer, y dieron la impresión de estar guardando algo la ropa en los últimos libres, por lo que Charles Leclerc y Sebastian Vettel serán hombres a observar. Algo más atrás, en el encarnizado duelo de la zona media, McLaren no está tan cerca de los tres mejores equipos como en la gira norteamericana, y tendrá que quitarse de encima los moscardones de Toro Rosso y los sorprendentes Alfa Romeo, muy competitivos a priori. Intensos retos para Carlos Sainz para afrontar un circuito que, llueva o no, no suele dejar indiferente a nadie.