Cuesta concebir hoy en día un calendario de Fórmula 1 sin la pasión, entrega y colorido que los fans mexicanos aportan en la víspera de su Día de los Muertos. Restacado del olvido en 2016, el Gran Premio de México y su Autódromo de los Hermanos Rodríguez plantea nuevos e intrigantes desafíos en cada edición, por la prevalencia de la potencia sobre la aero y la altitud a la que se encuentra la capital del país. Eso sí, sin tener la influencia sobre el orden establecido que hubo en Singapur.
Es por ello que, salvo sorpresa inesperada, no hay apuesta que deje fuera de la ecuación de la victoria a Max Verstappen. La de la pole puede estar algo más disputada por el mayor número de variables, pero el neerlandés está decidido a no dejar ni las migajas al héroe local Sergio Pérez, habiendo liderado los tres entrenamientos libres. Más allá de la potencial machada de un Checo necesitado de un golpe de efecto, otros parecen también en disposición de dar algún apuro al tricampeón en la sesión clasificatoria.
Williams, potencial sorpresa en las primeras líneas
La lupa recae en George Russell, algo más apagado en los últimos eventos y que está siendo el hombre puntero de Mercedes en tierras mexicanas, o en una Ferrari que se ha mostrado muy sólida siempre que el tráfico se lo ha permitido, tanto a Charles Leclerc como a Carlos Sainz. Una de las grandes incógnitas es McLaren, que bien podría haber seguido jugando al despiste, pero que no parece tan cómoda en el segundo puesto teórico por rendimiento que han venido ocupando recientemente sus pilotos.
No obstante, la sensación del fin de semana ha sido Williams, y más concretamente Alexander Albon. El piloto tailandés mandó algún que otro aviso el viernes de que las rectas favorecían notablemente a su chasis, pero este sàbado parece haberse destapado, con buenas vueltas que solo los mejores cronos de Verstappen han destronado del primer lugar. No ha podido igualar ese rendimiento Logan Sargeant, pero su presencia en las cercanías del top 10 durante las sesiones apunta a que ese coche puede dar un susto en la Q3 de hoy.
Alonso y el nuevo sinvivir de Aston Martin
Los sustos son de puro Halloween por ahora para Aston Martin, que parece condenada a su suerte de intentar solventar la Q1 sin mucho drama y buscar colarse en la Q3 por un destello de brillantez. Con un Lance Stroll que parece estar recuperado para la causa en un momento determinante, las aspiraciones de Fernando Alonso son contenidas, sin que el paquete de mejoras introducido en Estados Unidos probado de forma más exhaustiva en México parezca funcionar como se intuía en Austin, aunque el perfil del trazado no sea el mejor para ellos.