Tres sesiones de entrenamientos libres han servido para ratificar las sensaciones salvajes que desprende el circuito de Zandvoort, en su regreso mundialista como sede del Gran Premio de los Países Bajos. Todo ello converge hacia una sesión de clasificación que bien podría ser el punto álgido del fin de semana, así como la primera gran celebración de la hinchada local. La responsabilidad está en las manos de Max Verstappen, cuyo Red Bull ha exhibido el mejor ritmo de toda la parrilla con diferencia y cuenta con más neumáticos blandos que la competencia. Ni siquiera los mejores esfuerzos de Lewis Hamilton han sido suficientes por ahora.
La intriga reside en el resto de equipos que deberían seguirles, y es que tanto Aston Martin como Alpine se han mostrado en primera instancia en condiciones de discutir a McLaren y Ferrari el estatus de tercer mejor equipo. Buenas noticias para un Fernando Alonso que inició el sábado con muy buenas sensaciones, y no tan buenas para un Carlos Sainz que incluso podría no disputar la sesión clasificatoria si los daños sufridos en su accidente de esta mañana no se reparan a tiempo. Quien no competirá, sí o sí, es Kimi Räikkönen por su positivo en COVID-19, propiciando el regreso de Robert Kubica a la parrilla por primera vez desde la final de 2019, y su primer evento con Alfa Romeo.