Por cuarta vez esta temporada, la Fórmula 1 afronta un fin de semana que incluye el formato de carrera sprint para la jornada del sábado. Esto significa que, de nuevo, la tarde del viernes vuelve a ser sinónimo de clasificación. Un hecho que, por lo general, trae de cabeza a los competidores por el poco tiempo de preparación del que disponen, pero que se magnifica aún más en esta ocasión al tratarse de Losail, un trazado que, aún sin ser nuevo, es prácticamente como si lo fuera.
Dos años después de su peculiar debut en Fórmula 1, el Gran Premio de Qatar llega para quedarse en el mismo destino original, un Losail que ha atravesado importantes modificaciones en sus instalaciones desde entonces, así como en una pista reasfaltada, ensanchada en varios puntos... y repleta de polvo y arena, lo que reduce el potencial agarre prácticamente al mínimo exponente. Sin llegar al extremo de Turquía 2020 con el que muchos lo compararon, intentar salirse de pista ha sido una proposición complicada en los libres del viernes.
Red Bull, favorita hasta que se demuestre lo contrario
Nada de ello parece ser capaz de interponerse en la marcha triunfal de Max Verstappen, rumbo a un tricampeonato que cercenará casi con toda seguridad en la carrera sprint. El neerlandés fue el más rápido en los libres, batiendo por tres décimas a los Ferrari, y su ventaja bien podría ir a más en cuanto la linea de carrera vaya formándose. De nuevo, la iniciativa de la persecución no parece recaer en su compañero Sergio Pérez, muy lejos de sus tiempos en primera instancia, sino en los coches de la Scuderia.
Para ello, Carlos Sainz tendrá que maximizar su rendimiento, habiendo sido segundo en los libres, y dejar atrás las dudas de Japón. Eso sí, el madrileño no ha tenido prácticamente rivales directos con los que compararse más allá de Charles Leclerc, ya que Mercedes, Aston Martin y McLaren no montaron el neumático blando en estos entrenamientos. De hecho, los coches papaya no pasaron siquiera del duro, actuando Lando Norris y Oscar Piastri como grandes tapados en su busca de las dos primeras líneas.
¿Habrá sorpresa verde en una pista verde?
No llegaba con grandes expectativas Aston Martin a este fin de semana, y quizá la realidad empiece a manifestarse con crudeza esta tarde-noche, pero los grandes tiempos de Fernando Alonso con el neumático medio, los mejores de la parrilla, invitan a ser mínimamente optimistas en un evento en el que adaptarse rápido será clave. No solo la pista es un problema, sino también los diferenciales de temperatura, el intenso calor y el viento racheado que ha sacado de cuerda a más de un competidor, teniendo especiales problemas con ello los Mercedes.