La insultante superioridad de Mercedes en lo más alto de la tabla, con 68 puntos de ventaja sobre Red Bull ya a estas alturas del campeonato, se materializó con un Lewis Hamilton que ganó a tres ruedas y que promete ir a por todas una vez más en su cita local aunque sin el público que tanto le apasiona. Salvo que ocurra un cataclismo, el recientemente renovado Valtteri Bottas será el único candidato a aguarle la fiesta al #44 al contar con las mismas armas que él, si bien una nueva muestra de brillantez del hexacampeón similar a la que mostró en el último instante de la pasada sesión de clasificación será suficiente para que el finés vuelva a quedar por detrás ya desde el arranque de la carrera.
Más concentrado en la hidratación de sus mecánicos que de su participación en el Gran Premio, Max Verstappen tratará de aprovechar cualquier fallo mecánico o humano de los vigentes campeones para intentar amenazar nuevamente su hegemonía intachable. Algo más atrás estarán Racing Point y una Ferrari que saca ventaja adicional en este trazado gracias a llevar menos carga aerodinámica que el resto, mientras que McLaren y Renault se disputarán una vez más la posición de privilegio prolongando sus batallas en la ahora hiperpoblada zona intermedia de la parrilla.