Después de la travesía, desfile o competición monegasca (elijan ustedes su término favorito), la Fórmula 1 continúa en las calles, deleitándonos en esta ocasión con un trazado que debería presentar algo más de espectáculo. El Baku Street Circuit fue otra de las víctimas de la pandemia en 2020, por lo que este año celebra su quinta edición desde su debut en 2016, con el mismo circuito que alterna grandes avenidas con secciones reviradas y estrechas donde la precisión es crucial, incluso aunque la curva 8 se haya endulzado un poco.
Con el drama de la apurada llegada de Valtteri Bottas a la capital azerí en el día de ayer, Mercedes se lanza a proteger sus lideratos en un trazado donde, a diferencia de otros, Red Bull sí sabe como ganar "recientemente", a tenor del triunfo de Daniel Ricciardo en 2017. La mayor media de velocidad de este circuito pondrá a prueba la supuesta mejoría de Ferrari tras el excelente rendimiento de Mónaco, así como la solidez de un Alpine que sufrió muchísimo más de la cuenta a bajas velocidades con respecto a los trazados convencionales. Los libres irán limando todas esas asperezas.