La Fórmula 1 se encuentra inmersa en el primero de los dos tripletes con los que pondrá punto y final a la temporada 2024 tras tres semanas de inacción en los que los equipos han ideado las últimas evoluciones de unos monoplazas que vivirán el año que viene el último capítulo de la normativa vigente.
McLaren ha conseguido sacar partido del notable bajón de rendimiento de Red Bull a mitad de curso con una progresión imparable que, si bien han materializado en el campeonato de constructores, no le ha permitido hacer lo propio en el de pilotos a un Lando Norris incapaz de ponerse los galones y revertir su desventaja frente a Max Verstappen.
Fuera de lo normal
Con todo por decidir en este arreón final, tanto Oscar Piastri como 'Checo' Pérez sorprendieron negativamente en la jornada del sábado al caer a las primeras de cambio en Q1. Uno primero en su gran premio de casa, y el otro después con un rendimiento que había sido positivo hasta la hora de la verdad, dejaron a sus compañeros de equipo solos antes el peligro.
En su segunda temporada en Fórmula 1 como piloto oficial, Piastri ha mostrado alguna desconexión que denota que aún le queda recorrido para mostrar todo el talento que atesora, mientras que Pérez no ha hecho sino alimentar los rumores que le colocan fuera de la alineación de Red Bull de cara a 2025.
Dentro de este conjunto de acontecimientos lejos de lo habitual, Carlos Sainz estrenó su casillero de pole positions de 2024 con «un par» de vueltas claramente por encima de sus rivales que le proporcionará una visión despejada de una primera curva a la que confía en llegar primero.
Historia viva
Continuando en clave española, Fernando Alonso marcará un nuevo hito en una trayectoria deportiva que arrancó allá por 2001 celebrando en México su GP número 400aunque sólo es el 397.
El piloto más veterano de la parrilla de la categoría reina del automovilismo ha vivido diferentes etapas en su carrera, incluso se ha ido para volver a un deporte que le vio crecer tras probar fortuna en otros lares, pero aún a día de hoy prosigue haciendo gala de un rendimiento que en absoluto se ha ido apagando con el paso del tiempo.
El Aston Martin AMR24 no le permite codearse con la parte alta de la tabla como antaño, pero el bicampeón confía en que los comandados por Lawrence Stroll, ahora con Adrian Newey de su lado, den con la senda de desarrollo correcta de cara a los últimos años de su trayectoria como piloto del Gran Circo.
