Zandvoort es uno de los escenarios más reconocibles de la Fórmula 1 clásica, aunque su lugar en la Fórmula 1 moderna sea relativamente nuevo. Ubicado casi a la orilla del mar y en medio de una duna natural, este circuito acogió durante más de tres décadas el Gran Premio de los Países Bajos en una versión más amplia y veloz del actual trazado, hasta su salida definitiva tras la edición de 1985.
A su regreso en 2021, postergado un año por cuestiones pandémicas, el circuito había cambiado mucho, empleando la versión truncada por un campo de golf desde los años 90, pero con dramáticos peraltes que le aportan un plus de carácter. Adelantar en esta pista sigue siendo una proposición solo al alcance de los más osados o con mejor maquinaria, pero cualquier mínimo error puede verse penalizado en daños o abandono, algo de lo que todos los pilotos son plenamente conscientes.
La estrategia, clave ante la dificultad para adelantar
Quien no piensa en ello en absoluto es Max Verstappen, que busca repetir su dominante actuación de 2021 y vencer desde la pole position, que arrebató en la jornada de ayer a Ferrari y Mercedes cuando parecía que en esta ocasión le podía faltar algo más. El neerlandés, imparable en la conquista de su más que probable segundo entorchado mundial, tendrá que defenderse en la salida de la presión de los Ferrari de Charles Leclerc y Carlos Sainz.
Con lo discutida que ha estado la habilidad estratégica de Ferrari esta temporada, la capacidad de los pilotos de la Scuderia para intentar 'hacerle la envolvente' a Verstappen será clave para maximizar sus opciones de regreso a lo más alto del podio. Esto se ve magnificado por el hecho de que Sergio Pérez solo pudo clasificar quinto tras su tardío error en Q3, lo que le conmina a defenderse de George Russell e intentar dar cuenta de Lewis Hamilton antes de poder asistir a su compañero.
Alonso busca la décima... carrera en los puntos
En la pelea por ser 'el mejor del resto', Lando Norris tiene en esta ocasión todos los números, teniendo inmediatamente detrás a pilotos como Mick Schumacher, Yuki Tsunoda y Lance Stroll, sin tantas garantías competitivas por maquinaria o por excelencia al volante. Hay que bajar un poco más hasta encontrar a Fernando Alonso, cuya clasificación no salió en absoluto como pretendía, y que tendrá que avanzar desde el 13º puesto para intentar sumar puntos por décima carrera consecutiva.
La ardiente afición neerlandesa, a veces demasiado ardiente como se pudo observar por el doble lanzamiento de bengalas en la sesión clasificatoria, aporta un gran ambiente a una carrera que busca asentarse en el futuro, pero que bebe claramente de la ola de popularidad mundial de Verstappen. Es su carrera y su evento, y conseguir aquí su décima victoria de la temporada en apenas 15 eventos disputados parece casi una obligación nacional.