Aunque algo oscurecido por la mediática presencia de Fernando Alonso en las 500 millas de Indianápolis, nadie puede negar el atractivo, fama, prestigio e importancia del Gran Premio de Mónaco, la prueba emblema de la Fórmula 1 todos los años. En el día de hoy, el principado monegasco asume todos los focos con la celebración de la importantísima sesión de clasificación, en la que podría empezar a definirse el podio de la carrera de mañana. Si todo lo visto hasta ahora sirve de indicativo, al menos uno de los pilotos de Ferrari debería estar en ese podio, dado el fantástico ritmo que el Cavallino Rampante ha exhibido este sábado, ratificando las buenas sesancioes del jueves.
En esta ocasión, Mercedes parece estar en un segundo plano, lastrados por su dificultad para imprimir temperatura al neumático, algo vital en un trazado de tan escaso desgaste con gomas tan conservadoras como las que Pirelli ha diseñado este año. Aún con la posibilidad de que, a la hora de la verdad, mejoren las tres décimas de rigor, será una empresa hercúlea dar caza a Ferrari. Debería ser suficiente, eso sí, para repeler la amenaza de una Red Bull muy competitiva, que ha logrado excelentes cronos hasta ahora. Sin Alonso en pista, la atención española se centra en un Carlos Sainz que podría tener una gran oportunidad de obtener un buen resultado, dado que ambos Toro Rosso frecuentan las primeras 10 posiciones. ¿Le veremos en Q3 por segunda vez este año? A partir de las 14:00, empezaremos a resolver esa duda y muchas otras, y nosotros lo contaremos desde media hora antes, en riguroso directo.
