Domenicali dice que hay que cambiar la filosofía del equipo

La Scuderia Ferrari seguramente se esperaba mucho más de la temporada 2011. Más que una victoria precisamente en territorio enemigo, en Silverstone, no han podido celebrar.

Ahora llegan a Italia, su Gran Premio de casa, y Domenicali espera que Mclaren y Red Bull quieran vengarse por el Gran Premio de Gran Bretaña...

Desde la época de Michael Schumacher y Jean Todt han cambiado muchas cosas. Solo han ganado un título mundial (en 2007), pero el resto lo han perdido en la última carrera, como fue el caso de 2008 con Massa y 2010 con Alonso, o ni siquiera han podido luchar por el título, como pasó en 2009 y como está ocurriendo este año con la apisonadora Red Bull.

"Creo que ésta será la última temporada decepcionante", explica Domenicali. "Todt ha ganado mucho pero también ha tenido mucho tiempo para construir un equipo ganador. Fue excepcional. Ahora yo también lo quiero hacer y veo el futuro de forma optimista. Estamos construyendo las estructuras y una nueva base. Pero no tenemos ni una sola persona como Adrian Newey en Red Bull, porque somos un equipo".

Ya hace algunos días, anunciaron que el coche de 2012 sería mucho más radical, y es que en los últimos tiempos, en Ferrari habían sido muy conservadores, sobre todo desde que en 2009, cambiara todo el reglamento de forma radical. Escapes sopladores, dobles difusores, Conducto F... todas estas ideas no las ha tenido Ferrari.

"Si Ferrari quiere volver a estar delante, tenemos que cambiar nuestra filosofía. Si uno permanece lineal, no se avanza. Para un paso correcto, es necesaria la fantasía. Hay que arriesgar, o todo o nada", prosigue Stefano Domenicali. Pero a su vez, hay que considerar un tema fundamental: "La fiabilidad no se debe de olvidar".

"Necesitamos un buen comienzo de temporada. Alonso perdió el título de 2010 en primavera. Este año es aún peor. En Australia nos dimos cuenta de que éramos 1,4 segundos más lentos. Eso fue difícil de aceptar y además chocante. En febrero en los tests todo estaba ok, pero en marzo ya no era el caso".

Ahora llegan a Monza donde Fernando Alonso el año pasado fue vitoreado por los tifosi, después de lograr la victoria para los de Maranello. "Será un test de nuestro potencial. Estamos a la altura de nuestra competencia. En Silverstone ganamos, que es casa de Mclaren y de Red Bull. Eso les cabrea y ahora querrán vengarse. He obligado a mi equipo que lo eviten".

"Desde ahora hasta noviembre trabajaremos especialmente en establecer las bases para el año que viene. Estamos siendo agresivos, aunque el mundial ya esté perdido".