Las dudas sobre el GP de Australia crecen a sólo dos semanas de la fecha límite

El Gran Premio de Australia de 2019 tuvo que cancelarse el mismo viernes del inicio del evento, aproximadamente una hora antes de que los monoplazas saltaran a la pista y con los aficionados esperando a las puertas del circuito.

Eso, en un trazado urbano que debe montarse con antelación, supuso pérdidas económicas considerables para la organización y no es algo que la ciudad de Melbourne esté dispuesta a repetir en 2021.

Y, con la pandemia aún azotando buena parte del mundo, el Gran Premio de Australia de 2021 se encuentra nuevamente en peligro, ya que el inicio de los trabajos necesarios para el montaje del circuito deben empezar como muy tarde durante la segunda mitad del mes de enero. Esto se une a las medidas adoptadas por Australia recientemente, que obligan a toda persona procedente del extranjero a guardar 14 días de cuarentena, aunque la Fórmula 1 ya ha demostrado que es capaz de hacer frente a este tipo de restricciones.

Aplazamiento, no cancelación

La alternativa es buscar otra fecha más adelante, lo que obligaría a la Fórmula 1 a modificar la fecha de algunos Grandes Premios para crear un hueco en el que emplazar de nuevo al Gran Premio de Australia.

De confirmarse, sería el Gran Premio de Bahréin el que daría inicio a la temporada más larga de la historia, con 23 Grandes Premios programados de marzo a diciembre.

Además, eso podría crear un cambio de planes en la pretemporada, inicialmente prevista en Barcelona pero que podría trasladarse a Bahréin si finalmente el circuito de Sakhir acoge la prueba inaugural de 2021.

Fuente: Racefans.net