Fernando Alonso, la motivación a los 41 y la técnica de la bola alta en el tenis

No es un secreto que Fernando Alonso es uno de los deportistas más competitivos y comprometidos de este siglo, razón por la cual mantiene la motivación a sus 41 años. No sólo sigue en la Fórmula 1 con rivales hasta 20 años más jóvenes que él, sino que además mantiene su velocidad intacta.

Pero, ¿qué alimenta la pasión y la competitividad de Fernando Alonso a una edad a la que casi todos los pilotos de Fórmula 1 ya piensan en otras categorías o viven una vida mucho más normal? «Soy el tipo de persona que necesita hacer el 100% de lo mío, y necesito aniquilar cualquier fortaleza que tengan otras personas. Pero esto lo hago en todo lo que practico, cuando toco cualquier cosa».

«Cuando pierdo el coche, tal vez mis manos y mis pies hacen algo que no sabía antes porque solo pilotaba coches de F1»

Esa necesidad que tiene Fernando Alonso no la desarrolla únicamente en las carreras de coches, sino en todos los ámbitos de su vida, convirtiéndola en una obsesión y, también, en una costumbre.

«Yo jugaba al tenis, y cuando lo hacía con alguien bueno, lanzaba la pelota muy alta. Así les paras el ritmo porque están acostumbrados a pegarle muy fuerte a la pelota. Cuando se la lanzas muy alta, cometen errores porque les llega muy suave. Hacer eso es mi única oportunidad de ganarles», desvela Fernando Alonso.

Evaluar la importancia de cada cosa

La veteranía suele verse como un hándicap en el deporte, pero lo cierto es que todos aquellos competidores veteranos que mantienen la motivación se muestran implacables. Es el caso de Fernando Alonso, que mantiene una forma física envidiable, la combina con una motivación extraordinaria y la remata con una experiencia de valor incalculable.

«La experiencia ayuda de muchas maneras. las salidas, tomar conciencia de las cosas, gestión de neumáticos, paradas en boxes, la forma en que abordas la mecánica. También, la forma en que abordas el fin de semana: los entrenamientos libres, lo importante o lo poco relevante que es a veces», explica Alonso.

«Cuando eres joven, prestas mucha atención a cada vuelta que das; incluso los Libres 1 son como la última vuelta del campeonato. Con la experiencia entiendes estas cosas. No todas las vueltas son la última vuelta. Solía cometer errores al principio de las carreras que ahora trato de evitar. Y esto sólo viene con la experiencia y con tus propios errores».

Más experiencia, más recursos

Acumular experiencias le sirve a Fernando Alonso para saber identificar lo que merece más esfuerzo y lo que menos. Pero no sólo eso, también le ha permitido incrementar su catálogo de recursos a la hora de pilotar.

«No se trata únicamente de tu propia cabina y tu propia estrategia, así que tal vez tenga una mejor comprensión de cómo se desarrolla la carrera. Y también las diferentes categorías que hice: creo que me enseñan cosas diferentes», reflexiona.

«Hay diferentes filosofías de carreras, diferentes técnicas de conducción. No es que sean aplicables a un coche de F1, pero cuando pierdo el coche, tal vez mis manos y mis pies hacen algo que no sabía antes porque solo pilotaba coches de F1. Entonces, en cierto modo, ahora siento más el control de las cosas», concluye.

Fuente: Motorsport.comFotos: Alpine F1 Team