GP FranciaFerrari pone de manifiesto que la F1 manipula la realidad con las radios de las retransmisiones

El pasado domingo en Paul Ricard volvió a quedar patente que la Fórmula 1 utiliza los mensajes por radio de los equipos a su conveniencia, y no siempre con la sana intención de informar de manera rigurosa al espectador.

No es algo nuevo, pero en Francia Ferrari sufrió esta situación en dos ocasiones: la primera con el accidente de Charles Leclerc y la segunda con la última parada en boxes de Carlos Sainz.

«Vimos que Carlos no podía pasar a Checo en la recta opuesta y en la curva 10 decidimos llamarlo a boxes»

Al respecto de la primera situación, Charles Leclerc y Mattia Binotto explicaron que no era cierto que se hubiera producido un fallo en el acelerador del Ferrari F1-75 número 16, provocando a consecuencia de ello el accidente.

Esta teoría se originó al pinchar la Fórmula 1 la radio de Charles Leclerc durante la repetición de la salida de pista del monegasco. Una conversación en la que este informaba a su ingeniero de que no podía acelerar, seguida de un grito de desesperación.

Una semana antes, el propio Leclerc había tenido que terminar la carrera en Austria con problemas en el acelerador, que mantenía el motor revolucionado parcialmente en las frenadas.

Enseguida se extendió la teoría de que Leclerc se había salido al sufrir el mismo problema, cuando la realidad era que al engranar la marcha atrás para volver a la pista el coche no le permitía acelerar.

La segunda parada de Carlos Sainz

Más adelante en la carrera, Carlos Sainz se debatía entre intentar conseguir el podio manteniéndose en pista, pero arriesgándose a un reventón en los neumáticos, o parar una segunda vez en boxes y asegurar el quinto puesto.

«Después del coche de seguridad éramos el único coche con compuesto medio, mientras que todos nuestros rivales tenían neumáticos duros», explica Iñaki Rueda con respecto a dicha situación.

«Así que teníamos una ventaja sobre nuestros rivales y la habríamos tenido durante las primeras 20 vueltas, en las que el neumático medio habría sido mejor, pero nos habría costado llegar al final. Además, los pilotos con neumáticos duros habrían sido más rápidos que nosotros en la fase final del stint», amplia el ingeniero español, jefe de estrategia de Ferrari.

«La duración prevista para los neumáticos era de 25 vueltas, mientras que el stint después del SC duró 35, por lo que nos habrían faltado 10 vueltas. En estos casos, cuando un piloto sobrepasa la duración prevista del neumático, tiene que cuidar el neumático y conducir muy despacio. De lo contrario, existe el riesgo de que los neumáticos fallen», explica.

«La penalización de 5 segundos cambió nuestro enfoque del último stint, porque incluso si Carlos hubiera conseguido pasar a Russell y Pérez, nunca habría conseguido abrir una brecha de 5 segundos rodando con neumáticos medios hasta el final de la carrera».

«Conscientes de esta situación, decidimos parar a Carlos y asegurarnos de que volviera a la pista para conseguir el punto de la vuelta rápida», puntualiza Iñaki Rueda.

Pero dicha situación se entendió como una profunda confusión en la retransmisión de televisión, pues la realización pinchó primero una conversación en la que Carlos Sainz admitía que no podría adelantar a Sergio Pérez, dando por hecho que tendrían que hacer una segunda parada.

A continuación, Sainz ve una oportunidad e intenta el adelantamiento sobre Pérez, que dura varias curvas. Justo cuando el español pasa por la entrada a boxes en dirección a la última curva -mientras pugna por posición con el mexicano-, se produce esta conversación:

• Ingeniero de Sainz: «Box, Carlos, Box. Por favor, confirma».
• Carlos Sainz: «¡Ahora no, ahora no!».

De inmediato, todo el mundo entendió que el ingeniero le estaba pidiendo a Sainz que entrara en boxes cuando ya se había pasado la entrada y en mitad de la lucha con Pérez. Sin embargo, esa no había sido la situación real.

«Hay que recordar que las radios de los equipos que se emiten por televisión siempre tienen un retraso respecto a lo que ocurre en la pista», apunta Iñaki Rueda. «Carlos y Pérez se enfrentaron en la vuelta 41. Vimos que Carlos no podía pasar a Checo en la recta opuesta y en la curva 10 decidimos llamarlo a boxes».

«Obviamente, estaba en una pelea con Pérez y pensó que tendría que entrar en boxes en la siguiente vuelta, por eso lo dijo por radio», amplía Rueda. «Siguiendo la carrera por televisión, el mensaje de radio se emitió cerca de la curva 15, justo después de la entrada al pit lane, y no habría tenido sentido hacer una llamada tan tardía».

Es decir, la conversación se había producido cinco curvas antes de la emisión en televisión, lo que sin duda cambia mucho la percepción de la misma. En fin, todo por el espectáculo.

Fuente: Motorsport.comFotos: Scuderia Ferrari