Ferrari y McLaren, quienes mejor están lidiando con el ‘porpoising’

El principal quebradero de cabeza de los equipos en esta primera parte de la pretemporada está siendo el efecto rebote que crean los nuevos monoplazas al ganar velocidad en las rectas. Dos equipos se apañan mejor que los demás.

Ferrari y McLaren, quienes mejor están lidiando con el ‘porpoising’
Los coches de este año ruedan pegados al suelo.

5 min. lectura

Publicado: 25/02/2022 15:30

Como contábamos durante el segundo día de test en Barcelona, el temido porpoising está complicando la vida a todos los equipos, que ven este efecto rebote como el principal inconveniente del efecto suelo de los nuevos coches.

Este fenómeno hace que, a medida que el coche gana velocidad y el efecto de succión es mayor, el coche comience a dar botes sobre la pista a consecuencia de la súbita pérdida de carga aerodinámica y su posterior recuperación. Un efecto que se daba en los años 70 y 80, cuando el efecto suelo surgió por primera vez en la Fórmula 1, y que se minimiza con el uso del DRS, pues reduce la generación de cara aerodinámica.

Haas, Alfa Romeo…y Alpine

Dos equipos están sufriendo más de lo normal este efecto nocivo que, además de molestar notablemente a los pilotos, hace que el fondo del coche golpee contra el asfalto. También genera peligro de accidente si se produce en las curvas rápidas, algo que de momento no le ha ocurrido a nadie.

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Estos equipos son Haas y Alfa Romeo, que han podido rodar menos que el resto a consecuencia de los daños ocasionados. De hecho, el equipo estadounidense ordenó a sus pilotos que no pasaran de 250 km/h el primer día y ha instalado un resorte en la parte delantera del suelo para absorber los golpes ocasionados por el porpoising.

A pesar de estas imágenes, Ferrari es uno de los equipos que menos problemas tiene con el 'porpoising'.

«Todavía tenemos mucho que aprender sobre la configuración», confirma el director del equipo Haas, Günther Steiner. «Estamos buscando el término medio ideal. No demasiado bajo, para que el coche no golpee, pero tampoco demasiado alto y que pierda demasiada carga aerodinámica».

Estos dos equipos son los más afectados por una razón: los laterales del suelo de Haas y Alfa Romeo se doblan a alta velocidad, por lo que el efecto rebote se amplifica.

Los grandes difusores generan mucha succión en la zaga.

Alpine es otro de los equipos que está sufriendo con ello, algo a lo que se suman sus problemas con el DRS (no lo están utilizando en ningún momento) y el motor, que dejó tirado a Fernando Alonso a primera hora de la mañana de este viernes.

Alan Permane, director de operaciones de Alpine, señala que estos coches van «tan bajos como no lo han estado durante años. Los coches prácticamente ya no tienen altura. Es un rompecabezas de factores que pueden llevar a rebotar. Para averiguarlo, jugamos a través de muchos parámetros diferentes».

Ferrari y McLaren

En cambio, los equipos que menos problemas están teniendo son Ferrari y McLaren, que parecen contar con una aerodinámica más propicia a mantener la estabilidad a altas velocidades.

El director del equipo Mercedes, Toto Wolff, afirma que «la clave de las vueltas rápidas es conducir lo más bajo posible y aún así tener el problema del rebote bajo control. Ferrari y McLaren lo están haciendo mejor en este momento».

Esto se agrava ante la prohibición del uso de amortiguadores hidráulicos, inerciales y remotos. Este año, el reglamento sólo permite amortiguadores telescópicos y barras de torsión, por lo que la altura del coche no se puede modificar en función de la carga como en el pasado.

Ya lo dijo Mattia Binotto, el equipo que antes resuelva este problema derivado del efecto suelo, tendrá ventaja en las primeras carreras. Y parece que el equipo italiano y su eterno rival, McLaren, pugnan por la pole en este sentido.

Fuente: Auto Motor und SportFotos: Motor.es

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