La FIA revisa sustancialmente el sistema de puntos de la Superlicencia

Como viene siendo habitual, la FIA ha realizado su retoque anual al sistema de puntos para la Superlicencia, introducido en 2015 para imponer un criterio cuantificable al determinar si un piloto posee los requisitos necesarios para competir en Fórmula 1, debiendo obtener 40 puntos en un periodo de tres años. El cambio efectuado este año, que se ha aprobado en una reunión del Consejo Mundial del Motor en París, es el más exhaustivo hasta la fecha, afectando a la puntuación de un importante número de categorías y añadiendo otras muchas.

La puntuación que otorga la Fórmula 2 cada temporada se ve inalterada, con los tres primeros clasificados obteniendo los puntos necesarios para la Superlicencia, y se ha especificado que la puntuación que otorgan las temporadas 2015 y 2016 de GP2 es ligeramente diferente. La única otra gran categoría que ha mantenido su puntuación inalterada es la IndyCar, cuyo campeón contará con los 40 puntos necesarios, pero las otras tres categorías que garantizaban esa puntuación han visto reducida su relevancia.

En concreto, el campeonato europeo de Fórmula 3, la Fórmula E (sólo un año después de aumentarse su puntuación) y la clase LMP1 del Mundial de Resistencia ven como sus dos primeros clasificados pasan de sumar 40 y 30 puntos, a 30 y 25. En el caso de LMP1, serán 24 puntos para el segundo, pero todas las posiciones del cuarto hacia abajo reciben un incremento significativo, con el cuarto puesto otorgando hasta seis puntos más, 16, que hasta ahora. La GP3 también se ha visto ligeramente afectada, con el campeón sumando 25 puntos en lugar de 30.

Puntos de Superlicencia por categoría

La pérdida de nivel de la Fórmula V8 3.5, motivada en parte por como se trató a la categoría en el sistema original en 2015, se refleja con dureza, obteniendo el campeón sólo 20 puntos en lugar de 35, y con todos los puestos perdiendo puntos. Su cuantía respeto a la Superlicencia será equivalente a la de la Super Formula japonesa, un destino que había ganado en popularidad para potenciales pilotos de Fórmula 1 tras el paso de Stoffel Vandoorne y Pierre Gasly, y que también se ha revisado ligeramente a la baja. El resto de categorías ya existentes en el sistema conservan su puntuación, y sólo desaparece una, el Mundial de Rallyes, que otorgaba 15 puntos al campeón.

Por el contrario, se han introducido hasta 13 nuevas clases de categoría o vehículo que otorgaran puntos de Superlicencia, cubriendo muchas de las lagunas que tenía el sistema. El mejor valorado es la clase LMP2 del Mundial de Resistencia, cuyo campeón recibirá 20 puntos. Las clases GTE Pro y GTE Am también recibirá puntos, al igual que el campeonato IMSA en las clases Prototype y GT Le Mans. El mundo de la resistencia también recibe más reconocimiento en este sistema con la inclusión del Super GT japonés, las Le Mans Series en Asia (ALMS) y Europa (ELMS), y las Blancpain GT Series, bajo el nombre de "campeonato internacional de GT3".

La plana en monoplazas estaba ya bastante bien cubierta, pero la Fórmula 4 francesa, celebrada fuera de las normas de la FIA, quedaba en un vacío que ha sido solventado con su inclusión, además de la de la Pro Mazda, la segunda categoría en la escalera de formación de la IndyCar. También allende los mares, la NASCAR entra en el sistema de puntuación, tanto la Cup Series como las otras dos categorías nacionales (Xfinity y Trucks Series), amen de los SuperCars australianos. En cuanto al karting, se ha optado por acotar y diferenciar la puntuación entre campeonatos internacionales y continentales, y entre las clases senior y junior.

Nuevo estándar para circuitos y licencias A

La puntuación de las categorías no ha sido el único cambio introducido. Se ha condicionado la puntuación de la práctica totalidad de las nuevas categorías, además de la de otras ya existentes (IndyCar, Fórmula V8 3.5, Super Formula, DTM, Indy Lights, F3 nacionales y Formula Renault 2.0) a que todas sus carreras en circuito se celebren en trazados homologados por la FIA. El máximo organismo del motor pondrá en marcha procesos de homologación para "permitir que las asociaciones nacionales y los circuitos equipen sus instalaciones a un estándar apropiado y probado".

El otro gran cambio estará relacionado con la licencia internacional de Grado A necesaria para pilotar en F2 y, en definitiva, en toda categoría con un ratio peso/potencia igual o menor a 1 kg/CV. La FIA ha establecido que se implementará un sistema de puntos similar al de la Super Licencia de Fórmula 1 para tener acceso a esta Licencia A, afirmando que busca con ello "establecer un camino más claro para que los pilotos progresen desde las bases a los Campeonatos del Mundo"., limitando con ello que pilotos de escaso nivel y logros accedan a ciertas categorías. Quedará por ver si se logrará este propósito, pero nadie puede acusar al máximo organismo de no mimar su sistema de puntuación. Siempre que lo siga respetando, claro.

Fotos: Formula 4 US Championship / Super GT Series