La fiabilidad del STR12 lastra a Carlos Sainz y Daniil Kvyat

Carlos Sainz y Daniil Kvyat sólo han podido completar 65 vueltas por culpa de los diversos problemas del Toro Rosso STR12. El piloto madrileño tuvo que aparcar su monoplaza en el exterior de la curva 4 por una avería en la unidad de potencia.

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Publicado: 01/03/2017 22:00

Daniil Kvyat y Carlos Sainz han vuelto a compartir el Toro Rosso STR12 en la tercera jornada de test en el Circuit de Barcelona-Catalunya, aunque el balance de ambos ha estado lejos de ser positivo. No obstante, distintos problemas de fiabilidad limitaban el tiempo en pista de ambos pilotos, que al final cerraban la jornada apenas con 65 giros completados en común. En el caso de Carlos Sainz, un problema en la unidad de potencia obligaba al español a parar el STR12 en la escapatoria de la curva 4. Por su parte, Daniil Kvyat acusaba un fallo en el tren motriz.

Al acabar la jornada, Carlos Sainz explicaba: "Están investigando toda la zona del motor para ver qué ha sucedido. No me he salido de pista, he tenido que parar el coche porque de repente el motor ha dejado de funcionar. Por el momento no sé lo que ha pasado, están investigando. Al final sabíamos que el primer test iba a ser duro, porque el motor es nuevo. Nos hubiera gustado hacer más, pero tenemos que darles tiempo. La unidad de potencia es totalmente nueva y prevé un buen paso adelante en potencia, así que mientras esa potencia llegue para la primera carrera no nos quejaremos".

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En esta línea, Sainz añadía: "Renault han dicho que lo siente, pero que son cosas que suelen pasar en los test. Ojalá que a partir de ahora tengamos unos entrenamientos un poco más positivos. Ellos han hecho un esfuerzo muy grande para rediseñar el motor por completo y acercarnos en potencia a Mercedes y Ferrari, que también parecen haber dado un paso adelante. Ese esfuerzo se tiene que pagar de alguna manera. Pero como he dicho, mientras que en Australia tengamos la potencia necesaria, no me importa demasiado".

En términos de pilotaje, Sainz sí que se mostraba más satisfecho: "Las sensaciones han sido positivas en las vueltas que he dado, lo malo es que nos hemos quedado parado cuando empezábamos a coger un poco el ritmo. Es una faena porque ahora toca hacer kilómetros y por desgracia no tenemos todos los que nos hubieran gustado. En el segundo test, con compuestos más blandos, veremos cómo estamos en comparación con los demás. También digo que hasta que no haga 10 o 15 vueltas para ver cómo degrada el neumático y cómo funciona el coche, no estaré listo para poder tirar a tope".

Similares sensaciones transmitía por su parte Daniil Kvyat: "Estoy un poco frustrado porque hemos perdido algo de tiempo debido a un problema en el tren motriz. Es una pera para mí y para el equipo, porque debemos utilizar todo el tiempo que tenemos para sumar más vueltas en nuestra cuenta. A pesar de ello, saco notas positivas, porque el coche se siente bien y hemos encontrado cosas positivas los ingenieros y yo. Mis sensaciones con el coche también están mejorando vuelta a vuelta. Sólo tenemos que mantener la cabeza hacia abajo y seguir trabajando como lo hemos estado haciendo".

Con todo, la última jornada de test de esta semana será un tanto especial. No obstante, el asfalto se mojará artificialmente para probar los neumáticos Pirelli de lluvia. En este aspecto, Sainz ha afirmado: "Estamos interesados en conocer un poco mejor el neumático de lluvia, porque también es nuevo. En otros años no hubiera servido de nada, pero ahora la goma es más ancha. Hay mucho que aprender y analizar, aparte de dar más vueltas con el coche para ver qué detalles aparecen y que podamos solucionarlos durante estos días de pruebas".

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