El GP de Alemania, herido de muerte

El calendario 2015 de Fórmula 1 estaba previsto para 20 carreras, pero todo apunta a que se verá reducido hasta las 19. Y la prueba que se va a caer es, ni más ni menos, que el Gran Premio de Alemania. La crisis que atraviesa Europa -también el país germano, pese a que sigue siendo el motor de la Unión- y las altas pretensiones económicas de Bernie Ecclestone han dejado herida de muerte una de las pruebas más míticas de la historia de la Fórmula 1.

Ni los trazados de Hockenheim ni de Nürburgring están en condiciones de organizar el Gran Premio. En el caso del primer circuito, llevan negociando con Ecclestone y la FOM desde el año pasado. El problema es que no cuentan con el dinero suficiente y ni siquiera el buen momento de Mercedes, con Nico Rosberg como candidato a la victoria, es suficiente. Georg Seiler, director de Hockenheim, que albergó la prueba en 2014, ya ha tirado la toalla, como se desprende de sus declaraciones al diario 'Bild': “El tiempo para organizar la carrera se agotó. La calidad de la prueba habría sufrido”.

La opción natural era que Nürburgring fuera su sustituto, y de hecho para este año estaba señalado el 'Infierno Verde'. Sin embargo, Pietro Nuvoloni, portavoz del mítico circuito, también lo ha descartado. "Debido al escaso tiempo y a motivos de organización y económicos, no tiene sentido organizar el Gran Premio. El circuito presentó una oferta muy detallada e incluso señaló la posibilidad de asumir pérdidas económicas. Al no haber alcanzado un acuerdo, hemos cerrado las negociaciones. Lamentamos mucho lo ocurrido”.

No hay alternativa, por el momento, ni tiempo. Las entradas ya deberían haberse puesto a la venta, y los preparativos, en marcha. Salvo un milagro en el último momento, Alemania se quedará fuera de una temporada de Fórmula 1 por primera vez desde 1955.

Fotos: Mercedes