GP AustraliaLos guantes biométricos debutan este fin de semana en Australia

La Federación Internacional del Automovilismo ha introducido en esta temporada 2018 los guantes biométricos en la Fórmula 1. Con este nuevo instrumento, la organización y los equipos médicos tienen información a tiempo real sobre el estado de salud de los pilotos ya que estarán constantemente monitorizados, por lo que este avance podría, incluso, salvar vidas.

Estos guantes deberán equiparlos todos los equipos de la Fórmula 1; asimismo, su incorporación en futuros campeonatos está a la vuelta de la esquina. La pieza que recapitula esta información es flexible, de unos tres milímetros y está situado en la zona de la palma. La FIA ha estado trabajando estrechamente con los fabricantes de guantes que operan en la Fórmula 1, Puma, OMP, Alpinestars y Sparco, para integrar estos dispositivos minúsculos y hacerlos resistentes al fuego

Con el guante biométrico, el piloto queda totalmente controlado en el ámbito del pulso y también en el apartado de la cantidad de oxígeno en la sangre que ostenta. Esta información para el equipo médico es vital si hay un accidente grave, ya que si la lesión, por ejemplo, afecta a la respiración, su la cantidad del oxígeno en sangre bajará. La FIA, junto con el organismo Global Insitute, han fabricado este guante inteligente.

Estas nuevas manoplas arraigadas a la tecnología miden con exactitud cómo está el piloto antes, después y en el momento del accidente y, aunque el sistema ya alcanza una modernidad alta, sus creadores lo mejorarán según pasen los Grandes Premios. El delegado médico adjunto de la FIA en la F1, el Dr. Ian Roberts, y el conductor del coche médico, Alan van der Merwe, son las cabezas que lideraron el proyecto.

"Sabemos que el control del personal es esencial en términos de atención médica y los pilotos en los accidentes no son diferentes. Nos gustaría controlarlos a parir de ahora y evaluarlos tan pronto como sea posible. También hay ocasiones en que no se puede acceder al conductor de inmediato, así que si no podemos verlo o si no estamos realmente cerca de él, la información que podemos obtener es limitada", ha explicado Ian Roberts.

En el Gran Premio de Rusia de 2015, esta situación de incertidumbre se dio. Por aquel entonces, el piloto de Toro Rosso y actualmente de Renault, Carlos Sainz, tuvo un accidente en la curva trece en el trazado ruso. El piloto español salió ileso del fuerte choque, aunque al cuerpo médico le costó trabajar porque las barreras de protección se habían puesto por encima del madrileño. Realmente, los sanitarios no supieron si estaba bien o no hasta que no se retiró la protección, por lo que este nuevo elemento ayudaría en el caso de que esto se volviese a producir.

"La pieza que recapitula esta información es flexible, de unos tres milímetros y está situado en la zona de la palma"

"Esto permitirá controlar al conductor no sólo cuando todavía está en el monoplaza, sino que también ofrecerá un control continuo durante el transporte del paciente", ha finiquitado Alan van der Merwe. Las próximas actualizaciones que el nuevo aparato afrontará están asociadas a la temperatura del piloto y a la frecuencia cardíaca.

Fuente: FIAFotos: Red Bull / FIA