Haas ya sabe qué propició el desastre de Bahréin
Tras clasificarse en la sexta posición, Kevin Magnussen no pudo evitar hundirse en la carrera, terminar fuera de los puntos y doblado. Las dos jornadas de test en Sakhir permitieron a la formación estadounidense investigar las causas de tan antagónico rendimiento.
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Publicado: 11/04/2019 11:20
Haas protagonizó en el Gran Premio de Bahréin una de las actuaciones más extrañas de los últimos años en la Fórmula 1, pues tras clasificarse con sus dos monoplazas en la sexta y octava posición de parrilla -con Kevin Magnussen a sólo cinco milésimas del Red Bull de Max Verstappen-, su rendimiento en carrera fue casi comparable al de Williams.
El piloto danés comenzó disputando con Carlos Sainz la sexta posición, pero pronto comenzó a decaer para terminar fuera de los puntos y como uno de los pocos pilotos doblados en la carrera.
Afortunadamente, Haas pudo aprovechar los dos días de test programados para la semana siguiente en ese mismo circuito con el fin de investigar lo ocurrido. “Tener un mal fin de semana cuando a continuación hay programado un test, es tener suerte. Pudimos replicar y aprender de los problemas que nos encontramos en la misma pista un par de días antes. Encontramos algunas cosas interesantes que podrían explicar lo ocurrido. No es una sola, sino una combinación de cosas que fueron mal”, admitió Kevin Magnussen ya en China.
La principal causa fue la ausencia del paquete aerodinámico de media carga aerodinámica, pues Haas interpretó que no sería necesario en Bahréin y que con el de alta carga sería suficiente. Eso llevó al equipo a perder mucha velocidad punta en recta. Algo que no fue tan evidente en la clasificación, ya que se puede utilizar el DRS independientemente de si el piloto circula a menos de un segundo de otro coche, como en carrera.
“Sencillamente no teníamos el paquete inferior, el de media carga. Lo tenemos este fin de semana, pero no estaba listo. No esperábamos necesitarlo”, explicó Magnussen. “Nos fue bien en clasificación porque tenemos el DRS y la diferencia es menor, pero en la carrera rodamos sin él y, repentinamente, nos hizo falta mucha más eficiencia”, reconoció.
No sólo eso, pues el coche se regló de modo que fuera muy eficiente en clasificación, pero no en carrera, por lo que la gestión de los neumáticos se convirtió en una pesadilla desde las primeras vueltas. “Al final el coche estaba configurado en exceso para rendir a una vuelta. Tanto a nivel de carga aerodinámica, como de gestión de neumáticos, toda la puesta a punto del coche probablemente era errónea para tandas largas”, afirmó Magnussen.
En Australia, Haas clasificó sus dos monoplazas en sexta y séptima posición, consiguiendo Magnussen terminar la carrera como primer coche no Mercedes-Ferrari-Red Bull. En China, ya con el paquete aerodinámico de media carga disponible, el objetivo será recuperar el liderazgo del grupo intermedio.
Fuente: AutosportFotos: Haas F1 Team