Hamilton y Vettel dan por zanjada la polémica tras su incidente en Bakú

El primer turno de la rueda de prensa de hoy jueves estuvo enfocado en lo que, a todas luces, iba a ser el tema estrella de la tarde: el incidente entre Hamilton y Vettel en el Gran Premio de Azerbaiyán.

La ronda de preguntas por parte de los periodistas de la sala fue directa hacia el británico y el alemán que batallan por el mundial, al tanto que Kevin Magnussen se convertía en un mero espectador más. Inicialmente, la organización había decidido que ambos se sentaran el uno al lado del otro, pero finalmente fue el danés el que ocupó el asiento central.

“Sebastian y yo hablamos el lunes tras la carrera, y poco después me mandó un mensaje al día siguiente”, explicó el de Mercedes. “Personalmente, ya he dicho que le tengo el mayor respeto posible como piloto, y continuaré peleando con él en la pista el resto de la temporada, de la misma forma en la que lo hemos hecho siempre, sin bajar la intensidad”.

Lewis Hamilton aseguró que lo único que le molestó “fue que dijera que le había frenado intencionadamente”, y que solamente le pidió que lo corrigiera públicamente. “La gente que vio la carrera creyó que lo había hecho, pero lo cierto es que la telemetría demostró que no fue el caso, sino que, de hecho, Vettel aceleró”.

El de Heppenheim se acercó lo máximo posible a Lewis tras el anuncio de que el tercer y último Safety Car abandonaría la pista en la próxima vuelta. Los dos primeros relanzamientos habían surtido efecto para el #44, ya que consiguió escaparse del piloto de Ferrari y continuar liderando la carrera, y en esta ocasión Vettel no estaba por la labor de que esto se repitiera. “Fue un error de juicio suyo, simplemente quería que lo aclarase. No tenía intención de frenarle, no tenía la necesidad ya que iba en cabeza. Acepto sus disculpas y seguimos adelante”.

“Me alegra oír que esto no afecta a nuestra relación. Lo que hice estuvo mal, y pedí perdón”. Sebastian Vettel dio rienda suelta en Bakú a lo que Verstappen llamó en el segundo turno “su lado más humano”. Quizás sus quejas airadas, una vez estaba en paralelo con el W08, habrían quedado en el límite de lo permitido. Sin embargo, acabó cruzando la frontera con su decisión de tomarse la justicia por su mano y girar deliberadamente contra su rival.

“Cometí un error y puedo entender que esté molesto, pero es agradable saber que podemos avanzar”, confesó Sebastian. “El respeto que nos tenemos en la pista y fuera de ella ayuda en este respecto”. No obstante, ante la insistencia de los periodistas en que no había declarado a la prensa hasta este momento, optó por bromear. Después de decirle a uno de ellos que no tenía su teléfono para llamarle y contárselo, Vettel volvió a ponerse serio para recalcar, una vez más que “la persona con la que tenía que hablar era Lewis. El lunes fui a ver a la FIA en París, en la audiencia, y me preguntaron por mi opinión sobre lo ocurrido para abordar el incidente. No creo que fuera necesario hablar a la prensa justo después”.

Fotos: Mercedes AMG F1