Key busca "estabilidad" con Honda tras "tres motores diferentes en tres años"

El motor de un monoplaza supone una parte vital para el consecuente desarrollo de todo el conjunto, un componente que cobró una relevancia aún mayor en 2014 con el regreso de los propulsores turbo a la Fórmula 1. Los diferentes elementos que componen las unidades de potencia actuales han guiado a la categoría reina hacia una complejidad técnica acentuada con respecto a los V8, un factor que es más notorio en equipos que cuentan con un presupuesto menor.

Es el caso de Toro Rosso, una escudería que ha equipado motores Renault, Ferrari y que, a partir de 2018, contarán con un nuevo invitado: Honda. Los resultados ofrecidos por los nipones de la mano de McLaren no fueron del todo positivos, de ahí la ruptura de la relación que unía a ambos, aunque James Key se muestra optimista. “No quiero decir que no queramos ir a por la quinta plaza este año, por supuesto. Queremos tener el mayor éxito que podamos con nuestros socios de Honda, y ellos también están muy interesados en ello”, explicó el director técnico de los de Faenza.

“Vamos a esforzarnos mucho este año, pero creo que eso nos asegura un periodo de estabilidad realmente bueno, es muy importante”. Key subrayó la estabilidad que les pueda proporcionar su nuevo suministrador de motores por encima de la eficiencia que sean capaces de brindar a la formación satélite de Red Bull, confiando en resolver los problemas que puedan surgir con el tiempo. “Especialmente si tienes algo de trabajo por hacer; puedes hacer planes a largo plazo, y priorizar es un poco más sencillo también”.

Nos asegura un periodo de estabilidad realmente bueno, es muy importante; puedes hacer planes a largo plazo

El británico hizo hincapié en que “tenemos que recordar que Toro Rosso es bastante exclusivo en todo esto en varios sentidos: ¡hemos tenido tres unidades de potencia diferentes en tres años!”. El propulsor desfasado que la Scuderia les facilitó para hacer frente a la temporada 2016 con un presupuesto ajustado no favoreció en absoluto a Toro Rosso, razón por la cual decidieron volver a recurrir a Renault. “Nadie más ha hecho algo así; a menudo también han sido acuerdos muy tardíos, por lo que ha sido extremadamente perturbador y muy caro. No puedes hacer planes a largo plazo en esas condiciones”.

Honda y Toro Rosso anunciaron su acuerdo durante el transcurso del GP de Singapur.

Si bien Key confiesa que “hubo razones perfectamente válidas para que resultara así”, el responsable de Toro Rosso admitió que en su caso no fue “una inestabilidad que han sufrido nuestros rivales”, sino que derivó en una aún mayor. “Ahora tenemos una oportunidad de conseguirla. Sabemos qué motor vamos a tener en 2019 y 2020, así que podemos hablar ya con Honda”.

La esperanza de Red Bull está en hacer del motor Honda un producto fiable y potente para su futura implementación en el que sería el RB15, algo por lo que Key reveló que ya han hablado de lo que está por venir con los japoneses “para ver nuestras directrices de cara a 2019”, y de esa manera encontrar “una solución mucho más óptima con respecto al coche, y así sucesivamente. Para nosotros marca una diferencia enorme”.

Fuente: RacerFotos: Red Bull Content Pool