La FIA rechaza la apelación de Red Bull y mantiene la sanción a Ricciardo

Cuarenta y cinco días después de que los pilotos vieran la bandera a cuadros, es oficial el resultado de la primera carrera del año, la del Gran Premio de Australia. El tribunal de la FIA recibió el lunes en París a Red Bull. La escudería austríaca defendió la legalidad del monoplaza de Daniel Ricciardo en Melbourne, donde terminó segundo pero fue descalificado, perdiendo el podio y los puntos. La máxima entidad del automovilismo ha emitido hoy el veredicto poniendo fin a un caso que ha sido tema de conversación durante más de un mes. Se mantiene la sanción.

Decisión de la Corte Internacional de Apelación

La Corte, después de haber escuchado a las partes y examinado sus representaciones, decidió confirmar la decisión Nº56 de los Comisarios Deportivos que decidieron excluir de los resultados del Gran Premio de Australia 2014 al coche Nº3 de Infiniti Red Bull Racing. La Corte Internacional de Apelación estuvo presidida por Mr Harry Duijm (Holanda) e incluyó a Mr Rui Botica Santos (Portugal), Mr Philippe Narmino (Mónaco), Mr Antonio Rigozzi (Suiza) y Mr Jan Stovicek (Repúblicha Checa). La decisión completa será comunicada a finales de esta semana.

Por su parte, Red Bull emitió un comunicado aceptando el veredicto

Infiniti Red Bull Racing acepta el fallo de la Corte Internacional de Apelación. Estamos, por supuesto, decepcionados por el resultado y no habríamos apelado si no hubiéramos pensado que teníamos un caso muy fuerte. Siempre creímos que nos adherimos a la normativa técnica durante todo el Gran Premio de Australia 2014. Pedimos disculpas a Daniel (Ricciardo) que no recibirá los 18 puntos de la carrera, que creemos que merecía. Vamos a seguir trabajando muy duro para acumular la mayor cantidad de puntos posibles para el equipo durante toda la temporada. Ahora toca pasar página y concentrarse en el Gran Premio de China de este fin de semana

La causa de la descalificación fue que el RB10 de Ricciardo había excedido el límite de flujo de combustible, establecido en 100 kg/h y por desobedecer las indicaciones de su delegado técnico. Red Bull alegó que habían empleado sus propios métodos de cálculo porque encontraron desajustes en el medidor de flujo homologado por la FIA. La audiencia duró casi seis horas y a ella acudió un grupo de representantes del equipo tetracampeón, en la que se encontraban Christian Horner y Adrian Newey. También Mercedes, Mclaren, Lotus, Williams y Force India enviaron personal.

El caso fue presidido por cinco jueces. La vista comenzó a las 09:30 de la mañana del lunes, con la FIA exponiendo sus argumentos. Su abogado aseguró que en Red Bull estaban avisados y por tanto no tenían ningún motivo para no seguir las indicaciones de Charlie Whiting, y que si cada equipo sigue sus propios criterios, la Fórmula 1 puede convertirse en una anarquía. Paul Monaghan, representando a Red Bull, declaró que no midieron el flujo, sino que lo calcularon. Posteriormente hablaron Newey y un abogado del equipo de Milton Keynes.

También tuvieron turno de palabra un representante de Renault y Fabrice Lorm, representante de motores de la FIA. Entre tanto, el representante de Mercedes arremetió contra Red Bull, asegurando que incumplieron las reglas y que podrían volver a hacerlo en el futuro, y pidió para ellos una sanción más dura. En Mercedes criticaron con dureza a uno de sus máximos rivales por el mundial. Por su parte, Red Bull defendió que no existe una regla que aclare que el sensor de la FIA es el único método para medir y que, si este falla, pueden recurrir a emplear un método secundario, según el reglamento. No convencieron al tribunal.

Por tanto, el mundial queda como hasta ahora, con Ricciardo en la décima posición, sumando solo los 12 puntos del Gran Premio de Bahrein, y Red Bull en la cuarta plaza. Se mantiene la descalificación pero no aumenta la sanción al equipo, como pretendía Mercedes.