Informe F1​La pesadilla de Williams: neumáticos, carga aerodinámica y curvas lentas

Pat Symonds reconocía en la presentación del Williams FW38 que el equipo se había concentrado en minimizar las debilidades de su predecesor. Según el propio Director Técnico del equipo, “el FW37 era un coche bastante efectivo, por lo cual nos concentramos en comprender las áreas donde podíamos mejorar. No es ningún secreto que el rendimiento a baja velocidad del FW37 no igualaba el rendimiento que tenía en curvas rápidas”.

Pero el equipo no ha podido mejorar ese y otro de los aspectos que tradicionalmente han lastrado a Williams -y que es un problema muy característico de la mayoría de los equipos de la parrilla: la insuficiente generación de carga aerodinámica.

La velocidad punta suele enmascarar un problema

Es habitual ver cómo dos equipos de la parrilla suelen estar, casi de manera permanente, en las primeras posiciones de la tabla de velocidades punta en cada circuito: Manor y Williams.

Ambos cuentan con el propulsor Mercedes y, obviamente, ese es un aspecto principal. El otro es que sus respectivos paquetes aerodinámicos generan muy poco drag y, por lo tanto, las velocidades punta son excelentes. Pero, como contrapartida, el monoplaza no genera suficiente carga aerodinámica como para equilibrar dicha balanza y ambos equipos sufren en los circuitos lentos o de configuración de alta carga aerodinámica.

Centrándonos ya en el caso de Williams, podemos observar que el equipo de Grove ha ido perdiendo cada vez más potencial en circuitos que, a priori, debían ser buenos para sus características. La razón son los neumáticos. Especialmente en el caso de Felipe Massa -aunque no exclusivamente-, las dificultades para generar temperatura en los neumáticos han lastrado enormemente al equipo en circuito a priori favorables como Hockenheim o Spa-Francorchamps. Circuitos en los que las altas velocidades punta les permitían conseguir algo más de carga aerodinámica a través de los alerones, algo que los equipos motorizados por Renault y Honda no se podían permitir hacer.

Los neumáticos: la primera pieza del dominó

El problema es que si los neumáticos no cuentan con suficiente agarre, la carga extra que debe ayudarte en las curvas de media y baja velocidad se neutraliza. Y, en las curvas de baja velocidad, en las que el agarre mecánico -principalmente proporcionado por los neumáticos- lo es todo, Bottas y Massa también están perdidos. "Definitivamente, no hemos estado entre los cuatro primeros en cuanto a la compresión de los neumáticos y, si queremos esa posición al final del campeonato, tenemos que estar bien en todas las áreas, especialmente con los neumáticos. Otros equipos lo han hecho mejor y a nosotros nos ha costado una gran cantidad de puntos este año, pero sabemos qué pasa y estamos trabajando en ello", admitióValtteri Bottas tras el Gran Premio de Singapur, en el que él y su compañero terminaron fuera de los puntos: algo que en un equipo que aspira a ser cuarto a final de temporada, deja claro sus puntos débiles en circuitos de alta carga aerodinámica y predominancia del agarre mecánico.

"Los neumáticos nos han costado muchos puntos este año"

Aunque no es la respuesta a todos los problemas, la escasa generación de carga aerodinámica del chasis contribuye a potenciar los dos principales problemas que el FW38 tiene este año: insuficiente velocidad en curvas lentas e incapacidad para maximizar lo que los neumáticos pueden ofrecer, especialmente en el eje delantero. “Incluso en algunas carreras en las que sentimos que los monoplazas eran muy parecidos en términos de ritmo o incluso que nosotros éramos un poco mejores, de alguna manera lograron un mejor resultado en carrera", afirmó Bottas.

Williams fichó recientemente al especialista en materia de neumáticos de Ferrari: Antonio Spagnolo. Veremos si ello tiene repercusión en las últimas carreras de la temporada y el equipo puede contener a Force India y, sobre todo, si de cara a 2017, Williams mejora su gestión de los nuevos Pirelli.

Fotos: Williams