El límite presupuestario inquieta a Mercedes: «Luchamos con las mismas armas»
En la Fórmula 1, los equipos grandes operaban con presupuestos hasta tres veces mayores que el de los más modestos. Hasta la llegada del límite presupuestario, que equilibrará las fuerzas y ya genera ansiedad en potencias como Mercedes.
4 min. lectura
Publicado: 18/02/2021 09:30
En los últimos años, Mercedes, Ferrari y Red Bull han competido en la Fórmula 1 con presupuestos cercanos a los 400 millones de dólares anuales (unos 332 millones de euros). Mientras, formaciones como McLaren, Renault o Racing Point debían apañarse con la mitad o menos y equipos como Haas con una tercera parte.
Sin embargo, la llegada de la temporada 2021 marca el inicio de una nueva era en la que el reglamento también controla cómo y en qué se gasta el dinero, lo que para los equipos grandes supone un gran desafío.
«Somos uno de los equipos más grandes y tuvimos que averiguar cómo ganar con muchos menos recursos financieros»
«2021 es un gran año para la Fórmula 1», admite James Allison, director técnico de Mercedes. «Es el primer año de las nuevas reglas financieras, el llamado límite presupuestario. Un conjunto de reglas que obliga a los presupuestos de los equipos grandes a equipararse a los de mitad de parrilla y con el que todos básicamente tenemos la misma potencia de fuego financiero para gestionar el campeonato».
«Ha sido un cambio muy interesante en Mercedes, porque somos uno de los equipos más grandes de la Fórmula 1 y a consecuencia de ello tuvimos que averiguar cómo enfrentarnos al reto de ganar el campeonato con muchos menos recursos financieros de los que podríamos haber tenido anteriormente», apunta el ingeniero británico.
«Esto significa averiguar cómo podemos hacer que los componentes de nuestro coche duren más tiempo, cómo reducir los costes de fabricación y cómo asegurarnos de mantener el mismo rendimiento a pesar de que nuestro presupuesto general ha bajado», prosigue Allison. «Es un gran desafío y la construcción del coche es sólo una parte de él».
Igualdad… con matices
Lo que James Allison no cuenta es que el reglamento financiero, que ha entrado en vigor el pasado 1 de enero y ha tenido poca influencia en la concepción del coche de este año, prevé una serie de exenciones al control del presupuesto, entre las que se encuentran el coste de los motores, el sueldo de los pilotos y directivos de mayor rango o los gastos de marketing, entre otras cosas.
Eso, sobre la práctica, permite que los equipos eleven su gasto de los 145 millones de dólares fijados por reglamento a más de 200, cifra a la que varios equipos de la parrilla no han llegado en temporadas anteriores.
«Tenemos que desarrollar y gestionar el coche, hacer toda la temporada con las incertidumbres a las que nos enfrentamos en cuanto a accidentes o fiabilidad de componentes y luego necesitamos recursos gastados para arreglar eso», señala Allison.
«Probablemente el arma más grande que podríamos tener para atacar estas nuevas reglas financieras adecuadamente sería empezar con un coche que es rápido desde el principio porque entonces será más barato seguir siendo rápido durante toda la temporada», reflexiona el británico, ex de Renault y Ferrari.
«Por tanto, esperemos que el coche sea suficientemente bueno a principios de año, para así poder competir al más alto nivel bajo esta nueva restricción en la que luchamos exactamente con las mismas armas que el resto». ¿Las mismas? No exactamente.
Fuente: Mercedes AMG F1Fotos: Mercedes AMG F1