Los problemas de Red Bull aumentan

Posiblemente, durante los entrenamientos de la pretemporada de Fórmula 1 de 2014 Red Bull haya sido el equipo que más veces ha salido en un medio de comunicación y no por sus logros como en años anteriores si no por sus continuos problemas tanto mecánicos como de diseño.

Durante las últimas semanas, los constantes problemas en la refrigeración del motor Renault han impedido que en muchos casos Red Bull llegase a completar una vuelta. Es cierto que la mecánica francesa no es ni la más fiable ni la más potente pero las agresivas formas creadas por el diseñor jefe de Red Bull han sido las principales causantes de dichos fallos, o si no que le preguenten a Toro Rosso, Caterham o Lotus, equipos que con el mismo propulsor han sido capaces de rodar un mayor número de kilómetros.

Tales son las preocupaciones de los máximos responsables de la escuderia que han tenido que recurrir a Toro Rosso, equipo satélite perteneciente a Red Bull, para encontrar una solución. Helmut Marko afirmaba: "Esto es algo muy, muy serio. De momento no sabemos el tiempo que necesitaremos para ponernos al día o si lo haremos al completo". La división de competeción de Renault trabaja día y noche en solucionar los problemas de su propulsor.

A ello habría que sumarle la limitación impuesta por la FIA para utilizar un máximo de cinco mecánicas a lo largo de la temporada, cifra escasa que en el caso de romper varios motores durante las primeras carreras pondrá en serias dificultades a los equipos.

Junto con la falta de potencia y el sobrecalentamiento del motor, el Red Bull RB10, al parecer, sufre también problemas en el equipo de frenos. El último día de entrenamientos, Sebastian Vettel no conseguía detener su monoplaza antes de entrar en la curva. Acabó en la grava.