Max Verstappen, un prodigio de 18 años
Con su victoria en el Montmeló, Max Verstappen se ha convertido en el más joven ganador de un Gran Premio en la historia de la Fórmula 1. Un récord que se suma a los de debutante y piloto en puntuar más precoz de todos los tiempos.
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Publicado: 15/05/2016 17:00
Cuando Fernando Alonso, en el Gran Premio de Hungría de 2003, se convirtió en el ganador más joven de la historia de la Fórmula 1 (a sus, entonces, 22 años y 26 días), se antojaba una marca que sería complicada de mejorar. Cinco años después, Sebastian Vettel, en aquel Gran Premio de Italia disputado bajo el diluvio, reescribía la historia y rebajaba el listón en casi un año. Un margen que palidece ante el que acaba de establecer Max Verstappen: con su triunfo en el Gran Premio de España, a sus tiernos 18 años, siete meses y dieciséis días de edad, el prodigio holandés, en su debut con Red Bull, ha establecido una marca que parece destinada a perdurar en el tiempo.
Ello a consecuencia del límite mínimo de 18 años que fue aprobado por la FIA para optar a una superlicencia de Fórmula 1 con posterioridad al debut de Max Verstappen en el Mundial, que tuvo lugar en el Gran Premio de Australia de 2015. Contaba entonces con 17 años y 166 días de edad, lo que rebajaba el anterior registro (del español Jaime Alguersuari) en casi dos años. Era el primer hito en una carrera corta pero meteórica que le llevó a la máxima categoría el mismo año en el que había debutado en monoplazas, en el Europeo de Fórmula 3 de 2014, que concluiría en tercera posición.
En agosto de ese año, se unió al Red Bull Junior Team (tuvo también una oferta de Mercedes) y en cuestión de días Toro Rosso anunció su fichaje para la temporada 2015. No solo eso: al tomar parte en los primeros entrenamientos libres del Gran Premio de Japón de 2014, se convirtió en el más joven en participar en un fin de semana de competición.
En su estreno como piloto de Gran Premio, se le escapó la posibilidad de puntuar, debido a una avería de motor tras haber rodado entre los diez primeros, pero no tardó mucho en resarcirse: en la siguiente cita, en Malasia, Verstappen cruzó la meta séptimo (un puesto por detrás de su sensacional clasificación para la parrilla). Contaba entonces con 17 años y 180 días y desbancaba de lo alto de esa lista a Daniil Kvyat.
El destino ha querido que fuera precisamente el piloto ruso el que “cediera” su asiento en Red Bull a Verstappen para el Gran Premio de España. Y la caprichosa diosa Fortuna le asistió cuando, en la primera vuelta, los dos pilotos de Mercedes quedaron eliminados. Es el típico ejemplo de estar en el lugar adecuado en el momento oportuno; pero no es menos cierto que se lo había ganado a pulso, primero con sus destacadas actuaciones en Toro Rosso, que le valieron la promoción al primer equipo, y este fin de semana, en el estreno con Red Bull, al superar a los dos Ferrari en la parrilla y, ya en carrera, a su teórico jefe de filas, Daniel Ricciardo, en una carrera simplemente inmaculada.
Verstappen se convierte además en el primer piloto holandés que logra vencer en Un Gran Premio de Fórmula 1. Curiosamente, hasta ahora los mejores resultados de un piloto de esa nacionalidad eran sendos terceros puestos de su padre, Jos Verstappen, logrados de forma consecutiva en Hungría y Bélgica, en 1994, cuando militaba en la escudería Benetton.
Fotos: Red Bull