Análisis F1McLaren, termómetro de la Fórmula 1

El hecho de que McLaren corriera en 2014 sin un patrocinador principal no fue evidentemente una buena noticia para el equipo de Ron Dennis, por más que tuviera el presupuesto necesario para disputar la temporada con totales garantías. En realidad, no fue una buena noticia para la propia Fórmula 1 en sí. Que uno de los cuatro mejores equipos no fuera capaz de encontrar un patrocinador principal sólo podía significar que la categoría había perdido atractivo como escaparate para las grandes marcas.

Porque aunque en España hayamos pintado desde 2007 a Ron Dennis como el mismísimo demonio, el patrón inglés ha sido históricamente uno de los tipos más listos y competentes de cuantos se han movido en el paddock, consiguiendo que se asociaran a McLaren marcas como Porsche, TAG, Hugo Boss, Shell, Honda, Ford, Peugeot, West, Mercedes-Benz, Mobil 1, Johnnie Walker, Banco Santander o Vodafone, este último ‘robado’ nada menos que a Ferrari y cuya marcha a finales de 2013 provocó el vacío de patrocinio que analizamos. Algo grave está pasando en la Fórmula 1 si ni siquiera McLaren ha conseguido aún un patrocinador principal que satisfaga sus exigencias monetarias.

Sin patrocinadores

La Fórmula 1 apenas ha reaccionado a la crisis, al contrario, se ha enfrascado en el mayor cambio tecnológico de su historia. También el más caro. El resultado es que el cacareado límite presupuestario es poco menos que papel mojado, lo que provocó la desaparición de HRT, mientras Marussia y Caterham luchan por no correr la misma suerte. Tal es la ausencia de patrocinios en la Fórmula 1 que si Red Bull y Carlos Slim dejaran la categoría reina, ésta quedaría herida de muerte, con tres equipos al borde de la desaparición: Red Bull, Toro Rosso y Force India. No sólo eso, Sauber correrá en 2015 con dos pilotos de pago, mientras que Lotus lleva tiempo en el alero, ahora sostenida por el dinero que aporta el estado Venezolano gracias a Pastor Maldonado.

Jamás se vio en la categoría reina una ausencia tan notable de patrocinares. Estos parecen preferir inversiones más baratas, o asociarse a competiciones como la Champions League, que garantizan la exposición sin que correr riesgos tales como que el equipo que luzca tus colores no gane o luche por las victorias y, por lo tanto, no aparezca en la pequeña pantalla. Aunque no hay que desdeñar ni mucho menos la capacidad de la Fórmula 1 para establecer una marca a nivel global. El Banco Santander es el mejor ejemplo, pero no todas las marcas pueden permitirse el dineral que la entidad santanderina está invirtiendo en Ferrari, a lo que se suma el patrocinio de dos y tres Grandes Premios por temporada.

Llega la CNN

Aunque no se han hecho públicas las cifras de la inversión de CNN International en el equipo, la llegada de una marca de ese prestigio, insinuando que el acuerdo irá más allá del mero patrocinio (el logo de CNN aparecerá en el alerón delantero), es decir, que explotará al máximo el escaparate que ofrece la Fórmula 1, sólo puede ser una buena noticia. Primeramente porque atrae a un patrocinador estadounidense, poco dados a visitar la Fórmula 1, pero sobre todo por lo que representa. Pueden hacerse dos lecturas y ambas son igualmente positivas para la categoría. Por un lado, significaría que la crisis de patrocinios puede estar llegando a su final, de otro, puede entenderse que la Fórmula 1 sigue siendo vista como uno de los mejores escaparates posibles para poner una marca en el mapa global en el que se mueve el mundo de los negocios.

Patrocinadores McLaren-Honda

Lo mejor de todo es que ambas versiones son compatibles y quizá signifiquen que por fin los negros nubarrones que se venían cerniendo sobre la Fórmula 1 vayan poco a poco dispersándose. La confirmación definitiva sería que McLaren encontrara un patrocinador principal para este año, por mucho que Honda vaya a cubrir el presupuesto que sea necesario para volver a la senda de las victorias.