¿Realmente ha mejorado tanto Mercedes como para superar a Aston Martin? Esto dicen los números del GP de España

Analizamos lo sucedido en el Gran Premio de España, donde Mercedes superó con claridad a Aston Martin por primera vez esta temporada. ¿Realmente la actualización del W14 estrenada en Mónaco ha cambiado el orden jerárquico de la parrilla?

¿Realmente ha mejorado tanto Mercedes como para superar a Aston Martin? Esto dicen los números del GP de España
Fernando Alonso es presionado por George Russell el pasado domingo en Barcelona.

13 min. lectura

Publicado: 07/06/2023 10:30

Era el momento cumbre para Fernando Alonso, que esperaba volver al podio de Barcelona 10 años después y, quién sabe, quizá incluso luchar por la victoria. En cambio, el Gran Premio de España acabó siendo el peor de la temporada para Aston Martin y su estrella.

Y, tras ver a un Fernando Alonso completamente desdibujado en el Circuit de Barcelona-Catalunya, empieza a cundir el pánico entre algunos aficionados, que temen que el equipo de Silverstone haya comenzado a decaer en su rendimiento tras un inicio de temporada espectacular.

«Siempre hemos estado satisfechos con el coche después de la primera sesión, mientras que la puesta a punto básica no funcionó en España»

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Lo cierto es que ya se han cumplido siete Grandes Premios y los monoplazas han comenzado a evolucionar con respecto a su configuración de pretemporada, por lo que es inevitable que se produzcan alteraciones en el rendimiento de unos y otros.

La versión B del Mercedes W14

Mercedes esperaba volver a convertirse en el máximo rival de Red Bull tras un 2022 muy decepcionante en el que el ya famoso concepto zero pod demostró tener importantes carencias.

Sin embargo, los prometedores resultados de final de temporada, con doble victoria de George Russell en el fin de semana ‘Sprint’ de Brasil incluida, animaron a Mercedes a seguir apostando por un concepto innovador y distinto al del resto.

La realidad golpeó duramente a Mercedes ya desde la pretemporada, por lo que el equipo anglo-germano se puso manos a la obra para rectificar un concepto que, ahora sí, era claramente erróneo.

La versión B del Mercedes W14 ha ofrecido un rendimiento prometedor en Barcelona.

«Necesitábamos este shock al comienzo de la temporada para comprender que esto no avanzaba, que no habría mucho más rendimiento», ha reconocido Toto Wolff esta misma semana en Barcelona.

«Tomamos la decisión de ir en otra dirección y cambiamos tantas partes que pensamos que tal vez no estábamos comprendiendo por completo las variables», explica el director de Mercedes. «Fue un movimiento arriesgado, todos empujaron hacia adelante y obtuvimos un buen coche de carreras».

Ese «buen coche de carreras» debía debutar en el cancelado Gran Premio de Emilia-Romaña, por lo que Mercedes tuvo que cambiar el plan y presentarlo por primera vez en Mónaco. Aquel fin de semana, en un circuito único y muy poco dado a extraer conclusiones válidas, Lewis Hamilton y George Russell obtuvieron resultados similares a los de carreras anteriores.

Aston Martin comienza con el pie torcido en el GP de España

Aston Martin llegaba a Barcelona tras conseguir el mejor resultado de la temporada en Mónaco y en medio de un debate sobre si un error estratégico había impedido la victoria de Fernando Alonso en el Principado.

Por tanto, las expectativas de cara al Gran Premio de España eran muy altas y la afición soñaba incluso con ‘La 33’.

Pero pronto las cosas empezaron a torcerse, no sólo con un Red Bull dominador en un circuito eminentemente aerodinámico, sino también con un Aston Martin AMR23 que se sentía incómodo en el circuito catalán, algo nada habitual.

«Hasta ahora, siempre hemos estado satisfechos con el coche después de la primera sesión de entrenamientos, mientras que la puesta a punto básica no funcionó en España», reconoció Fernando Alonso el domingo tras la carrera.

Y las cosas fueron a peor en la clasificación, cuando el propio piloto español se disponía a comenzar su primera vuelta rápida en la Q1, sufrió un repentino sobreviraje en la rápida curva de entrada a meta. Pudo controlar el coche y ‘surfear’ sobre la grava para volver a pista, pero dañó seriamente el suelo del coche en el proceso.

Tras cometer un nuevo error de pilotaje en la Q3, debió conformarse con la novena posición de parrilla, que pasó a ser la octava tras una doble sanción a Pierre Gasly.

Mientras, los Mercedes tampoco lo hacían mucho mejor, con Lewis Hamilton quinto (cuarto en parrilla) y George Russell 12º.

Mercedes supera a Aston Martin con claridad

El domingo las cosas fueron muy diferentes para Mercedes, que mostró un ritmo de carrera muy superior al de Aston Martin.

Pudo verse con Lewis Hamilton, que a las primeras de cambio se colocó tercero y posteriormente segundo tras el decaimiento de Carlos Sainz, pero también con George Russell, que no tardó en adelantar a Fernando Alonso y escaparse con facilidad del piloto español.

La clave de todo ello estuvo en la gestión de los neumáticos por parte de Mercedes. Mientras Aston Martin sufría con los blandos, tanto Lewis Hamilton como George Russell pudieron alargar sus relevos con este compuesto, llegando incluso a parar nueve y 10 vueltas más tarde que Sainz y cinco y seis más tarde que Alonso respectivamente.

Fernando Alonso pierde terreno y se ve acosado por Sergio Pérez, que salía undécimo.

Esto, además, les permitió prescindir del compuesto más duro, ya que el relevo intermedio con neumáticos medios les llevó hasta las vueltas 50 y 45 respectivamente, pudiendo así afrontar la fase final de la carrera de nuevo con los neumáticos blandos.

En ese momento, Fernando Alonso ya había recuperado ritmo y ganaba posiciones con el neumático duro, pero esto sólo le permitía llegar a la séptima posición, tras un Lance Stroll que había soñado con el podio al inicio de la carrera, pero que al igual que su compañero, se dio de bruces con la realidad.

La clave estuvo en los neumáticos

Tanto en 2022 como en este inicio de temporada 2023, Mercedes ha disfrutado de una gestión de los neumáticos bastante positiva, pero se ha encontrado con un monoplaza carente de velocidad suficiente para inquietar a Red Bull.

En Barcelona, un circuito que este año cambiaba la odiada chicane del tercer sector por el doble curvón de alta velocidad que da entrada a la recta de meta, esto se hizo aún más importante.

El circuito catalán siempre ha sido aerodinámicamente relevante. La razón es que cuenta con curvas de todo tipo, incluidas varias de media y alta velocidad, algunas de ellas con mucho tiempo de giro (curvas 3, 4, 10).

Este año, con la supresión de la chicane, dicho carácter se ha visto acentuado y el neumático delantero izquierdo sufrió especialmente. Esto no sólo obligó a los pilotos a afrontar una estrategia de dos paradas, algo extraño en tiempos de Pirelli, sino a contemporizar el ritmo para no tener que hacer una tercera detención en boxes. Y Mercedes sacó mucho partido de todo ello.

¿Ha mejorado Mercedes o ha empeorado Aston Martin?

Conocidos los hechos, es momento de determinar si este cambio de tercio se debe a una mejoría de Mercedes o a un mal fin de semana de Aston Martin.

Comenzando por la clasificación, Mercedes fue ligeramente superior a Aston Martin, que por primera vez tuvo a Lance Stroll como piloto más rápido del equipo. El canadiense se quedó a 0,722 segundos de la pole, con Lewis Hamilton cediendo 0,546 segundos con respecto a Max Verstappen.

¿Se equivocó Aston Martin a la hora de interpretar las necesidades de los neumáticos en Barcelona?

Estos datos contrastan con lo visto hasta entonces en la temporada, ya que Aston Martin contaba con un promedio de 0,482 segundos por vuelta de pérdida con respecto a la pole ideal en las seis clasificaciones anteriores. Mercedes, por su parte, registraba un déficit promedio de 0,616 segundos por vuelta antes de Barcelona.

Sin embargo, el dato más representativo es el que nos dejó la carrera.

En las seis carreras anteriores, Fernando Alonso había sido el piloto más rápido del equipo, finalizando las carreras a una distancia de 38 segundos en Bahréin (remontada tras acabar séptimo la primera vuelta), 20 segundos en Arabia Saudí, menos de un segundo en Australia (Safety Car), 22 segundos en Azerbaiyán, 26 segundos en Miami y 27 segundos en Mónaco.

Por su parte, la desventaja del piloto de Mercedes mejor clasificado en las seis carreras anteriores fue la siguiente:

  • Bahréin: Lewis Hamilton (+50 segundos)
  • Arabia Saudí: George Russell (+26 segundos)
  • Australia: Lewis Hamilton (+0,1 segundos - Safety Car)
  • Azerbaiyán: Lewis Hamilton (+46 segundos)
  • Miami: George Russell (+33 segundos)
  • Mónaco: Lewis Hamilton (+39 segundos)

¿Cómo contrasta esto con lo sucedido en el Gran Premio de España. En el Circuit de Barcelona-Catalunya, Lewis Hamilton le ganó la partida a George Russell (que partía 12º), llegando en segunda posición a 24 segundos de Max Verstappen, con su compañero a 32 segundos del neerlandés.

Por su parte, los Aston Martin tuvieron el peor día de la temporada, cediendo nada menos que 63 segundos con Lance Stroll justo por delante de Fernando Alonso.

Podemos deducir de esto que Mercedes experimentó una ligera mejora con respecto a lo que nos tiene acostumbrados este año, con su desempeño de Arabia Saudí a un nivel muy similar al visto en Barcelona.

En cambio, Aston Martin perdió aproximadamente medio minuto con respecto a lo mostrado de forma habitual este año durante las carreras. ¿Quiere decir esto que Mercedes ha superado a la formación de Silverstone con su nuevo W14?

Es probable que este haya supuesto un avance con respecto a la especificación anterior, pero lo que es indudable es que Aston Martin tuvo un muy mal fin de semana en España y lo normal es que vuelva a su rendimiento habitual en próximas carreras.

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