Mercedes modificó sus llantas en Austin para evitar una reclamación de Ferrari

Tras implementar un nuevo diseño en el Gran Premio de Bélgica, los alemanes complementaron el mismo con un nuevo diseño de tambor de freno en Singapur. La FIA informó a Mercedes que consideraba legal el diseño, pero en el Gran Premio de Estados Unidos la marca de la estrella ha preferido no correr riesgos.

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Publicado: 23/10/2018 09:30

Los problemas de blistering que Mercedes ha sufrido en Austin han reavivado un asunto que parecía haber llegado a su fin: las llantas canalizadas. Los alemanes introdujeron en Spa-Francorchamps un diseño de llanta trasera que incluía microcanales interiores y unos orificios centrales para mejorar la circulación del flujo aerodinámico, incrementando así la refrigeración de los frenos y el neumático.

Pero en Singapur, dicho elemento se complementó con un tambor de freno que permitía conectar los orificios centrales de la llanta con unos practicados en el mismo, potenciado dicho efecto y llevando a Ferrari a plantearle a la FIA un estudio del sistema, pues podría considerarse un elemento aerodinámico móvil.

Charlie Whiting y su equipo examinaron el conjunto y determinaron que era legal, pero dicha opinión es simplemente informativa, pues si se produce una reclamación en un Gran Premio, corresponde a los comisarios de dicho evento decidir si se cumple el reglamento y existe la posibilidad de que la interpretación sea distinta.

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Por esa razón -y según publica Autosport-, en Austin Mercedes decidió tapar los agujeros de la llanta para evitar así cualquier opción de enfrentarse a una hipotética descalificación, poniendo en peligro la tremendamente favorable posición de Lewis Hamilton y el equipo en los campeonatos de pilotos y constructores respectivamente.

Kimi Räikkönen adelantó a Lewis Hamilton en la primera curva y, desde ese momento, todo se complicó para el británico.

Sea casualidad o no, lo cierto es que los problemas de gestión de neumáticos volvieron a aparecer en la marca de la estrella, sufriendo Lewis Hamilton problemas de sobrecalentamiento con su segundo juego de neumáticos tras una parada adelantada por la aparición del coche de seguridad, lo que comprometió su segundo puesto e impidió que el británico certificara matemáticamente el título.

Lewis Hamilton no quiso especificar, pero tras la carrera hizo referencia a diversos problemas que empeoraron la gestión de neumáticos. “Nos vimos forzados a realizar dos paradas por ciertas cosas que teníamos en el coche que no eran las ideales. No sabíamos que iba a ser el caso cuando iniciamos la carrera. Sin ese problema, la gestión de los neumáticos habría estado lejos de ser una preocupación, explicó.

Fuente: Autosport

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