GP EuropaMercedes vuela bajo en la primera toma de contacto con Bakú

La primera sesión de entrenamientos libres de la historia de la Fórmula 1 en Bakú no deparó un horizonte muy distinto del visto en otros Grandes Premios. Aprovechando la longitud de las largas rectas, ambos Mercedes han copado las dos primeras posiciones. En cabeza, Lewis Hamilton, que dejó el crono en 1:46.435.

Al igual que muchos otros, el piloto británico exploró en varias ocasiones las escapatorias del trazado, buscando los límites de la pista. Eso causó que, al final, no pudiese realizar el long run que tenían planeado, ya que uno de sus neumáticos presentaba un desgaste demasiado acusado. Nico Rosberg terminó a cuatro décimas, siendo las Flechas Plateadas los únicos coches en bajar de 1:47 en esta primera sesión.

Las virtudes de los Williams salen a relucir en pistas así, lo que permitió a Valtteri Bottas obtener el tercer mejor tiempo a apenas seis décimas de Hamilton, y Felipe Massa en octavo lugar. Tras el finlandés, aparece Fernando Alonso en una sorprendente cuarta posición, propiciada por un rebufo durante su vuelta buena. Aún así, los tiempos del McLaren no fueron para nada malos, como evidencia la séptima posición de Jenson Button. El crono del asturiano, aún así, fue obtenido con neumático blando, lo que invita a un cierto optimismo.

Ferrari asumió un papel más discreto en esta primera tanda. Sebastian Vettel mejoró en los últimos minutos de la sesión para acabar quinto, pero su 1:48.627, un crono un segundo mejor que el de Kimi Räikkönen, le deja a un par de segundos de Mercedes.

Para Red Bull, no obstante, la sesión fue una pesadilla, con ambos pilotos terminando antes de tiempo. Max Verstappen sufrió un problema mecánico en la primera media hora que obligó a reparaciones en boxes, y Daniel Ricciardo se convirtió en la primera víctima de Bakú, al entrar con demasiada velocidad en la curva 15 y golpear las barreras con la parte trasera del monoplaza, que quedó considerablemente destrozada, lo que desencadenó una bandera roja de 10 minutos.

En el seno de Toro Rosso, la sesión dejó sensaciones encontradas. Carlos Sainz tuvo problemas durante la sesión para marcar una vuelta buena y dañó su alerón delantero en un pequeño golpe con una barrera. Aún con todo, terminó marcando el noveno mejor crono de la sesión, un 1:49.267 con el que superó a Daniil Kvyat en más de un segundo.

La primera toma de contacto con Bakú se saldó con varias salidas de pista, en especial pasadas de frenada. El de Ricciardo fue el único incidente serio de una sesión que, por lo demás, transcurrió con la normalidad y los errores dignos de un circuito urbano nuevo, sin mayores dramas en secciones que habían causado preocupaciones en los pilotos, como las curvas 3 y 8.

Fotos: Formula 1