Nikita Mazepin denuncia una «doble moral» en la Fórmula 1

La Fórmula 1 no es más que un reflejo de la sociedad en algunos aspectos y el de la tendencia a criticar constantemente es uno de los mejores ejemplos de ello. Este año el principal blanco de ellas es Nikita Mazepin, que llegó a la categoría reina tras un sonado escándalo que le ha marcado desde el inicio.

A eso hay que sumarle numerosos errores en un año en el que no ha tenido más que un día y medio de pretemporada con un monoplaza realmente complicado como el Haas, lo que ha hecho que sus salidas de pista, trompos e incidentes con otros pilotos hayan sido magnificados en ocasiones.

«Es una batalla que nunca ganaremos. A la gente le encanta ver la felicidad y la ira al mismo tiempo»

El primero llegó nada más comenzar la temporada, cuando en la clasificación del Gran Premio de Bahréin Nikita Mazepin no respetó el llamado pacto de caballeros por el cual no se debe adelantar a otro piloto unas curvas antes de que este comience su vuelta rápida, pues de lo contrario compromete su procedimiento de calentamiento de neumáticos.

«Todo el mundo ha hecho un gran negocio en un punto en el que yo no sabía mucho sobre la clasificación en sí en la Fórmula 1», ha respondido Mazepin al respecto de aquel incidente. «Fue mi primera vez y además nunca he competido en una categoría donde eso se aplicara o discutiera. Y como recién llegado a la Fórmula 1, eso no se discute en una sesión informativa de pilotos o en cualquier otra reunión con pilotos incluidos».

Doble moral

Un ejemplo que le sirve a Mazepin para ilustrar la doble moral con la que se juzga a según qué pilotos, señala el piloto ruso, pues no ha sido el único que ha generado problemas similares en la Fórmula 1.

«Creo que la F1 es un mundo de doble moral y si tienes un gran nombre con un montón de campeonatos en tu haber, tus acciones son menos criticadas que si no lo tienes», reitera el piloto de Haas, que además recuerda lo ocurrido en Austria el pasado sábado. «En la sesión informativa de los pilotos (en Austria), nuestro director de carrera explicó nuevas reglas, pero lo que vi en la Q2, y el incidente entre Alonso y Vettel, fue exactamente lo contrario».

«Sólo hay que aplicar las mismas reglas a todos y entonces la F1 será un lugar feliz», apunta Mazepin. «Pero es una batalla que nunca ganaremos. Al final, la Fórmula 1 es un deporte entretenido y a la gente le encanta ver la felicidad y la ira al mismo tiempo. Les gusta ese espectro de emociones y creo que la F1 está haciendo un gran trabajo a la hora de lograrlo. Así que no creo que podamos mejorar eso, desafortunadamente».

Fuente: The RaceFotos: Haas F1 Team