El primer resultado del trabajo de Ferrari para la FIA: más control en los motores

Creó mucha polémica e incluso promovió la queja formal de siete equipos de la parrilla, pero lo cierto es que todo el revuelo quedó finalmente en nada y la FIA se salió con la suya: al ser incapaz de demostrar que Ferrari hacía trampas con el motor, decidió alcanzar un acuerdo privado con el fabricante italiano.

A cambio de terminar la investigación y no imponer sanciones, Ferrari realizaba algunas modificaciones en el motor y, de paso, trabajaba estrechamente con la FIA para encontrar maneras de atajar posibles lagunas en el reglamento. Y los frutos de dicha asociación ya han surgido.

Se trata de dos directivas técnicas en las que se acota aún más el control sobre la quema de aceite y el despliegue de potencia del ERS (Energy Recovery System). En el primer caso, en el que la FIA lleva años intentando evitar que el lubricante se utilice como generador de potencia, no se permite un consumo superior a 0,3 litros por cada 100 km. Ahora, el organismo regulador introducirá nuevos controles para asegurarse de que ello se cumple.

Como también implementará nuevos controles de monitorización de la potencia que despliega el ERS, tanto la energía eléctrica utilizada como la recuperada, pues existen sospechas de que algunos motoristas sortean el límite de potencia establecido por reglamento.

Paralelamente a esto, la FIA ha anunciado el lanzamiento de una línea telefónica directa, a través de la cual se pueden denunciar irregularidades técnicas o la violación de cualquier otra normativa FIA.

Fuente: AutosportFotos: Scuderia Ferrari