Dos grandes problemas para el Alpine A522: el sobrepeso y el porpoising

En una temporada 2022 en la que resulta complicado predecir el orden jerárquico de la parrilla, resultan cruciales los pequeños detalles y Alpine tiene unos cuantos problemas que solucionar de cara al inicio de la competición.

El primero es de sobra conocido y ha afectado a casi toda la parrilla. El ya famoso porpoising o rebote se ha convertido en protagonista de la pretemporada y Alpine ha sido uno de los equipos que lo ha sufrido con mayor intensidad, si bien Otmar Szafnauer afirma que han realizado avances en este sentido.

«Cuanto peor sea el problema, más motivados estaremos para solucionarlo»

«La buena noticia es que (en Bahréin) no lo tuvimos tan fuerte como al principio», señala el director de Alpine. «Cambiamos algunas cosas del coche, no sólo la altura. En nuestras simulaciones, no pudimos ver eso, o no sucedió. Y no era realmente algo a lo que los diseñadores y los aerodinámicos tuvieran en mente prestar atención. Sólo apareció durante los test».

«Esto demuestra que a pesar de todas las herramientas de simulación que tenemos, no hay nada comparable a la realidad. Pero creo que cuanto más aprendemos sobre cómo afinar el coche, más nos acercamos a una solución», señala el ingeniero rumano.

«Y cuanto más aprendes, más puedes cambiar el diseño para resolver el problema. ¿Sucederá esto rápidamente? Creo que cuanto peor sea el problema, más motivados estaremos para solucionarlo».

El sobrepeso

Si bien el porpoising puede solucionarse modificando elevando la altura del coche o modificando la puesta a punto y la aerodinámica, el segundo problema es más complicado de resolver.

Se trata del sobrepeso, mal que también afecta a la mayoría de los equipos de la parrilla en una temporada en la que diferentes causas han generado un aumento notable en este sentido.

Y es que, a pesar de que se elevó el peso mínimo a 790 kg. para compensar las ruedas más grandes y el aumento de seguridad, muchos coches no llegan e incluso se ha llegado a acordar un incremento adicional de 3 kg.

«Bueno, en Alpine no somos un Alfa Romeo, pero no creo que seamos los que más problemas tienen», apunta Szafnauer aludiendo directamente al único equipo que tiene un coche por debajo del peso mínimo.

«Estamos en algún punto intermedio. 10 kilos suponen cuatro décimas de segundo. Esa debería ser una gran motivación para deshacerse de esos diez kilos. Y el rendimiento vendrá porque sabes que está garantizado, pero eso costará algo de dinero», admite Szafnauer.

Su salida de Aston Martin

Finalmente, el nuevo director de Alpine ha hablado de las causas que propiciaron su marcha de Aston Martin, equipo en el que desempeñaba un papel similar.

«Tengo una gran relación con los hombres y mujeres de Silverstone», comienza diciendo. «En los 12 años que estuve allí, el equipo creció más del doble. Muchas de las personas que fueron contratadas cuando estuve allí fueron, no quiero decir elegidas personalmente, pero formé parte de su reclutamiento y contratación, así como de armar un equipo que compenetró y funcionó bien».

«Pero como me dijo un amigo mío, la iglesia católica sólo tiene un Papa. Y cuando tienes dos, simplemente no está bien. Así que creo que era hora de irme y dejar Aston Martin a su único Papa, y voy a tratar de ayudar a Alpine lo mejor que pueda», concluye.

Lawrence Stroll, propietario del equipo, es el actual CEO de Aston Martin Lagonda y el pasado mes de septiembre fichó a Martin Whitmarsh para ocupar el cargo de director ejecutivo de Aston Martin Performance Technologies.

Fotos: Alpine F1 Team