Prost cuenta su verdad sobre su salida de Alpine F1; a Rossi no le gustará

Alain Prost, cuatro veces campeón del mundo y pieza importante en la historia de Renault en Fórmula 1, abandona Alpine con un sabor agridulce tras filtrarse en la mañana del lunes 17 de enero que su contrato no había sido renovado.

El francés llegó a Renault F1 en febrero de 2017 con el objetivo de apoyar a Cyril Abiteboul en la renovación y ascenso del equipo, que anteriormente había pertenecido a Lotus y se encontraba en una situación delicada.

Pero el invierno pasado, coincidiendo con la conversión del equipo a la formación representante de la marca de automóviles Alpine y la llegada reciente de Luca de Meo a la presidencia del Grupo Renault, Abiteboul fue despedido y llegó Laurent Rossi para liderar Alpine Cars.

Una tricefalia que ya no existe

Desde ese momento, Alpine pasó a ser gestionado por tres personas, Laurent Rossi como principal encargado del área institucional y comercial, Marcin Budkowski al frente de la fábrica y el desarrollo técnico, y Davide Brivio encargado del aspecto deportivo y organizativo en los circuitos.

Budkowski fue recientemente despedido y ahora Alain Prost también dice adiós visiblemente molesto con Laurent Rossi. «¡Estoy muy decepcionado por cómo se ha anunciado esta noticia hoy! ¡Se acordó que lo anunciaríamos junto con Alpine F1! ¡Qué falta de respeto! He rechazado la oferta que me hicieron en Abu Dhabi para la temporada 2022 por una relación personal y tenía razón. Al equipo de Enstone y Viry, los extrañaré».

Rossi quiere toda la atención

El tetracampeón, y expropietario de la escudería Prost Grand Prix, también ha ofrecido su primera entrevista tras confirmarse su marcha, afirmando que Laurent Rossi quiere toda la atención para sí mismo.

«Cuando el jefe no te saluda al llegar al circuito es porque no hay diversión ni respeto, y eso no funciona. Rossi quiere estar solo, que nadie le contamine», señala Alain Prost. «Me dijo en Qatar que no necesitaba más consejos, y aun así me ofreció un contrato en Abu Dhabi, que rechacé».

«Laurent Rossi quiere todos los focos, cuando a mí lo que me interesa es el desafío de pertenecer a un equipo y estar en las decisiones», reitera un Prost que desvela que Luca de Meo le ofreció la presidencia de Alpine F1 a finales de 2020. «En septiembre de 2020, Luca de Meo me ofreció ser presidente de Alpine F1. En principio acepté».

Posteriormente, la salida de Cyril Abiteboul y la posterior llegada de Laurent Rossi cambiaron los planes, permaneciendo Prost como director no ejecutivo del equipo. «La temporada 2021 fue disruptiva, demasiado complicada. No estaba involucrado en las decisiones y a veces tampoco las compartía, pero debía seguir el discurso oficial. De algunas me enteraba en el último minuto. Había celos».

Dudas con el motor

A pesar de todo, Alain Prost tiene fe en el trabajo realizado y cree que Alpine puede cumplir sus ambiciosos objetivos en 2022. El francés sólo expresa una duda con el motor, que será completamente nuevo y deberá mostrar su valía después de tres temporadas de escaso desarrollo en este ámbito.

«Se ha hecho un gran trabajo y a esta dirección habrá que juzgarla por los resultados de los próximos dos años. Todo se puso en marcha para 2022. Es un proyecto ambicioso. Sólo está la duda del motor, no por fiabilidad sino por prestaciones, pero eso no se sabrá hasta que el coche esté en la pista».

Es de esperar que pronto se anuncie la llegada de Otmar Szafnauer como relevo de Budkowski, todo ello como parte del plan de reestructuración que semanas atrás anunció Laurent Rossi en el equipo en el que milita Fernando Alonso.

Este año, Alpine tiene la intención de aprovechar la llegada del nuevo reglamento técnico para ascender en la parrilla y pasar a convertirse en uno de los equipos habituales en la lucha por el podio y las victorias.

Fuente: L'Équipe