Red Bull cifra en 75 días el retraso provocado por el túnel de viento
Los problemas de correlación de datos que Red Bull encontró en su túnel de viento han supuesto que el equipo haya renunciado a su objetivo de disputar el título. Christian Horner considera que la segunda mitad de temporada será mucho mejor que la primera y el equipo recuperará el tiempo perdido.
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Publicado: 11/08/2017 13:30
Christian Horner ya reconoció el pasado mes de junio que la mayor parte de los problemas que Red Bull está teniendo este año para ser competitivo vinieron propiciados por un error de correlación de datos entre el túnel de viento y la pista.
El túnel de viento es una herramienta extremadamente sensible que debe ser constantemente monitorizada para que su calibración sea la correcta, pero en su fiabilidad influyen muchas más cosas como, por ejemplo, el tamaño de la maqueta que es objeto de estudio. “Fue un traspiés, (los datos proporcionados por) las herramientas no coincidían con lo que estábamos viendo en la pista. Principalmente fue el túnel de viento quien hizo que nos perdiéramos un poco”, reconoció Christian Horner en unas declaraciones publicadas por Autosport.
Red Bull ha estado trabajando con unas dimensiones determinadas durante los últimos años, al igual que el resto de equipos. Pero el nuevo reglamento de 2017 que ha propiciado coches y neumáticos de mayor tamaño, obviamente ha tenido su influencia en el túnel de viento. “El tamaño del modelo, el tamaño de los neumáticos en el túnel nos proporcionó algunos resultados falsos en áreas en las que anteriormente había sido muy, muy fiable. De repente teníamos una divergencia entre la pista, el túnel de viento y la DCF (Dinámica Computacional de Fluidos)”.
Trabajas a tope para recuperar el tiempo perdido, pero el resto de equipos no se quedan parados
La razón es que las paredes del túnel de viento provocan distorsiones en los resultados y cuando más alejada esté la maqueta de las mismas, más uniforme será el flujo aerodinámico y los resultados. Al crecer la maqueta del monoplaza de 2017, dichos resultados debieron ser interpretados teniendo en cuenta el factor corrector a aplicar por la mayor proximidad de las paredes del túnel, pero Red Bull no consiguió hacerlo correctamente. “El mayor problema fue que el coche se hizo mucho más ancho, mucho más grande, provocando mucho más blocaje en el túnel. Y el nuestro es particularmente sensible a ello, dando problemas que no habíamos visto anteriormente”.
Christian Horner estima el retraso propiciado en el ritmo de evolución en unos dos meses o incluso algo más. “Ello probablemente nos ha costado entre dos meses y dos meses y medio de retraso. Después, obviamente, trabajas a tope para recuperar el tiempo perdido, pero el resto de equipos no se quedan parados”.
En cualquier caso, Horner predice una segunda mitad de temporada muy distinta, pues desde mayo el monoplaza ha ido mejorando de manera progresiva, especialmente en condiciones de carrera. “La base, el concepto fundamental, es el mismo. Es más el modo de evolucionarlo, la dirección ha cambiado y nos está proporcionando buen rendimiento. Desde Barcelona, en cada Gran Premio hemos extraído cada vez más potencial del coche. Hemos conseguido buenos progresos en esta primera mitad de año y esperamos ser mucho más competitivos en la segunda”.
Desde el Gran Premio de España, Daniel Ricciardo ha encadenado cinco podios con una victoria incluida en Azerbaiyán, pero Max Verstappen ha sufrido cuatro abandonos por distintas circunstancias.
Fuente: AutosportFotos: Red Bull Content Pool