Red Bull da por hecho que el motor del Ferrari SF-23 incluirá un notable incremento de potencia

Con el objetivo de abaratar los costes asociados a la unidad de potencia híbrida, la FIA aprobó la congelación del desarrollo de las mismas durante las tres temporadas que restan para que entre en vigor un nuevo reglamento.

Así las cosas, actualmente no es posible realizar modificaciones basadas en un aumento de rendimiento. Estas pueden hacerse únicamente si están destinadas a solucionar problemas de fiabilidad.

Primero un motor potente, luego fiable

Con ello en mente, todos los motoristas de la Fórmula 1 buscaron en 2022 crear un motor con las mayores prestaciones posibles, aunque eso implicará ciertos problemas de fiabilidad. Tanto Mercedes, como Honda RBPT, Renault y Ferrari, los sufrieron, aunque fueron los dos últimos quienes más problemas tuvieron.

En el caso de Ferrari, esto incluso obligó a reducir la potencia del motor en muchas carreras de la temporada, permitiendo a Red Bull obtener aún más ventaja. Sin embargo, la formación anglo-austriaca espera que en 2023 las fuerzas se igualen.

«Los motores están homologados, por lo que, en teoría, no debería haber grandes aumentos de potencia. Además, el combustible está homologado, por lo que no se deben permitir nuevos combustibles», ha declarado Christian Horner en una entrevista concedida a Auto Motor und Sport.

Pero eso no quiere decir que Ferrari no vaya a mejorar el rendimiento de su motor, ya que si ha conseguido solucionar sus problemas mecánicos, podrá utilizar la unidad de potencia a pleno rendimiento y sin temor a roturas.

«Ferrari tuvo algunos problemas de fiabilidad el año pasado, por lo que si han logrado solucionar eso y, a través de eso, han podido aumentar su potencia, inevitablemente, experimentarán algún tipo de progreso este año», reconoce el director de Red Bull Racing.

Red Bull espera una notable mejoría de Ferrari

Horner admite que Red Bull debe ser «consciente» de la capacidad que tiene Ferrari para ganar rendimiento por el simple hecho de poder utilizar el motor con una configuración más exigente, ya que en 2022 se vieron obligados a reducir la potencia para atajar los problemas de fiabilidad.

Y es que el motor italiano demostró en 2022 tener mucho potencial, aunque este no pudo ser aprovechado la mayor parte del tiempo.

«Es una gran cantidad, así que tenemos que ser conscientes de eso», reconoce Horner. «Los vimos reducir la potencia después de sus fallos el año pasado. Así que sabemos que su motor tiene capacidad para aumentarla más».

Red Bull también experimentó problemas relacionados con la fiabilidad en las primeras carreras del año, en las que sufrió tres abandonos, pero Horner admite que no fue necesario reducir la potencia del motor. «Tuvimos algunos pequeños problemas de fiabilidad, pero nada de la magnitud de Ferrari».

¿Será suficiente para que el Ferrari SF-23 alcance el rendimiento que se le presupone al Red Bull RB19? Comenzaremos a saberlo a partir del 23 de febrero, cuando empiece la pretemporada 2023 en el circuito bahreiní de Sakhir.

Fuente: Racingnews365