GP Austria F1 2014Red Bull Ring no fue territorio Red Bull

Red Bull es el único equipo, a excepción de Mercedes, que sabe lo que es ganar esta temporada. Lo había hecho Ricciardo en la anterior carrera, y los de la bebida energética llegaban al circuito de su propiedad , en su país, con toda la ilusión del mundo y la esperanza de conseguir un gran resultado. Sin embargo, pronto se vio que el RB10 no se adaptaba a las características del trazado, y la clasificación lo confirmó. Vettel quedó fuera de Q3 y Ricciardo salvó medianamente los muebles siendo quinto en la jornada del sábado. Desafortunadamente para ellos, el domingo no mejoró.

El equipo que ejercía de local en esta carrera salió de Austria con solo cuatro puntos. Los consiguió Ricciardo con un octavo puesto. Vettel, por su parte, sumó su tercer abandono de la temporada, nuevamente por problemas de fiabilidad. Fue, como declaró el jefe de equipo Christian Horner, un día duro en pista para los actuales campeones. El monoplaza de Vettel perdió potencia y se paró en la vuelta 2. Posteriormente se recuperó y, con una vuelta perdida, el alemán esperó a que saliera un Safety Car. No ocurrió, y en la vuelta 28 se tocó con Esteban Gutiérrez mientras le intentaba adelantar y dañó su alerón. Entró a cambiarlo, pero pocas vueltas después dio por finalizada su carrera: “Estábamos doblados y decidimos ahorrar kilometraje”.

Vettel se mostró resignado pero aceptó que así es este deporte: “Ha sido una mala primera mitad de temporada con algún abandono y otros problemas, pero supongo que es parte del juego”. Sebastian extrae una visión positiva con el octavo puesto de Ricciardo: “Pudimos aprender y es bueno que Daniel haya conseguido puntos”. Vettel está familiarizado con los problemas en este 2014: “Sería malo decir que me he acostumbrado, pero no es algo nuevo y esta vez estuvimos más tranquilos ante los contratiempos”. Ricciardo se sintió frustrado pese a que en la última vuelta adelantó a Hulkenberg para terminar octavo: “A parte de eso no fue una gran carrera para nosotros. Tenemos trabajo por hacer”.

El australiano llegó a los puntos, entre otras cosas, por la fiabilidad del equipo filial de Red Bull, que hizo pleno de abandonos con Kvyat y Vergne, completando un fin de semana para olvidar en la empresa que tiene los derechos del circuito de Spielberg. Christian Horner apuntó a la falta de potencia como principal clave de su bajo rendimiento: “Nuestra falta de velocidad en las rectas nos hizo mucho daño en el Red Bull Ring, a pesar del adelantamiento final de Ricciardo a Hulkenberg. La posición octava era lo máximo a lo que podíamos aspirar”.

Horner, pese a los malos resultados, quiso felicitar a los organizadores del gran premio: “Fue un evento fantástico, con mucha gente. Es genial que la Fórmula 1 vuelva a Austria. Felicidades al señor Mateschitz y todo Red Bull por este gran premio maravilloso que muestra cómo puede y debe ser promovida una carrera de Fórmula 1”. En el equipo austriaco estarán ansiosos por volver en 2015 y cambiar el mal sabor de boca que ha dejado este fin de semana.