Brawn cree saber cómo acabar con las sanciones por cambio de motor

El Director Deportivo de la Fórmula 1 considera que es necesario eliminar un sistema que está perjudicando la competición. Ross Brawn cree que la clave está en simplificar piezas clave como el turbo o los sistema de recuperación de energía para hacer innecesario su control de uso.

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Publicado: 17/11/2017 14:30

Los motores de 2021 se han convertido en el símbolo de la nueva Fórmula 1 y Ross Brawn está firmemente decidido a justificar el enfoque que Liberty Media y la FIA han adoptado para su reglamentación.

Bajo la premisa básica de crear propulsores baratos, tecnológicamente más sencillos y más ruidosos para que los aficionados se identifiquen con ellos, Ross Brawn se puso a trabajar hacer unos meses, presentando los primeros acuerdos el pasado 31 de octubre.

Pero mientras llega 2021, la Fórmula 1 debe convivir con unos propulsores lleno de complejidades que sólo Mercedes y, en menor medida Ferrari, han logrado entender en su globalidad. Mientras ambas marcas acumulan sólo 20 posiciones de sanción por exceder el límite de componentes del propulsor esta temporada, Renault ha sumado 310 y Honda, con un único equipo, 380.

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El MGU-H y el turbo son los elementos estrella en este infierno de fiabilidad en el que andan sumidos los equipos motorizados por estos dos últimos suministradores y Ross Brawn cree tener la solución al problema. “Lo que creo que deberíamos intentar con el nuevo motor son componentes económicos que se cambien siempre que se quiera. Si adoptamos un diseño distinto de turbo, uno homologado que cueste 2 o 3.000 dólares, ¿por qué tendríamos que preocuparnos por cuántos se utilicen? Cuando el turbo que utilizas es tan caro y complicado como ahora, es cuando se hacen necesarias las limitaciones”.

En el tercer año de desarrollo, Honda sigue necesitando el triple de lo permitido en algunos componentes clave del motor como son el MGU-H o el turbo.

Y es que, en declaraciones a Autosport, el ingeniero británico afirma que eliminando el alto coste y el factor técnico diferencial, no tiene sentido controlar su uso y, por tanto, tampoco penalizar en consecuencia. Grandes marcas como Mercedes, Ferrari o Renault ya han criticado esta búsqueda de la sencillez y los bajos costes, pues ven amenazada su posición de privilegio al permitirle a marcas más modestas entrar como competidores.

Llevamos cuatro temporadas con esta tecnología y aún tenemos demasiadas penalizaciones

Ross Brawn reconoce la excelencia alcanzada por Mercedes, que ha demostrado dominar todos los aspectos de los motores actuales y ser perfectamente capaz de cumplir con las exigencias de cuatro motores por temporada, pero considera que esta normativa ha desconectado a los aficionados de la Fórmula 1 por no ser atractiva ni técnicamente sencilla de entender. “En un entorno en el que los aficionados son lo más importante, no podemos fallar siendo tan extremos que perdamos contacto con ellos, porque sólo unos pocos pueden entender la tecnología y la excelencia de la misma. Llevamos cuatro temporadas con esta tecnología y aún tenemos demasiadas penalizaciones. Todo el crédito para Mercedes, han hecho un trabajo fantástico, pero nadie puede alcanzarles. Es la realidad”.

Fuente: Autosport

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