Sauber renuncia oficialmente a los motores Honda para 2018

El reciente despido de Monisha Kaltenborn tras varios desencuentros con los propietarios del equipo Sauber ha desencadenado más consecuencias de las esperadas y, sobre todo, más trascendentales.

Y es que los propietarios de Sauber no confían en Honda como suministrador de motores y han decidido no rubricar el preacuerdo alcanzado con los japoneses. Esa podría haber sido la principal causa del despido de Monisha Kaltenborn, que fue la artífice del acuerdo con Honda para 2018. Un acuerdo que no había sido firmado y que finalmente se ha cancelado, tras ratificar el nuevo jefe de equipo Frederic Vasseur la iniciativa tomada por los propietarios de Sauber.

Al respecto de la ruptura del acuerdo con Honda, el francés ha comentado que "desafortunadamente los planes de colaboración con Honda deben cesar en este punto. La decisión ha sido tomada por razones estratégicas y con el futuro de Sauber F1 Team en mente. Nos gustaría agradecer a Honda su colaboración y desearles lo mejor en la Fórmula 1".

Dicho contratiempo pone en problemas a Sauber, que ya había comenzado a trabajar en el monoplaza de 2018 con el motor japonés como epicentro del diseño del mismo. Ya en 2016 tuvo que renunciar al motor Ferrari de este año para no retrasar en exceso la concepción del Sauber C36 bajo el nuevo reglamento y ahora los suizos se ven en una situación similar, con el proyecto iniciado y sin tener claro qué motor impulsará al C37.

Honda también queda en una situación comprometida, sin un segundo equipo al que suministrar en 2018, con las consecuencias que eso tendría en el desarrollo del motor, pero sin la certeza de que McLaren vaya a continuar con ellos, especialmente tras haber negociado los de Woking con Mercedes como plan B si las cosas no mejoran en la casa nipona.

Fotos: Sauber