Schumacher se alegra por la victoria de Ferrari

3 son los años que la Fórmula 1 ha estado sin Schumacher, cuando con motivo de la rueda de prensa tras su victoria en el GP de Italia de 2006, anunciara el alemán su retirada de la competición. El piloto de 41 años ha regresado, con las mismas ganas de antes. Y no se le ha olvidado lo que es un Fórmula 1. A pesar de haber quedado por detrás de su nuevo compañero de equipo en la cita inaugural del año, a pesar de no estar entre los top 3, el heptacampeón esta contento de su regreso.

"Seguramente fue mejor que mi primera carrera de 1991", bromea el alemán. "Como todos esperábamos, Ferrari y Red Bull realizaron un gran trabajo. Sobre todo me alegro por Ferrari. Después de un año complicado han regresado para luchar por las victorias". Mientras tanto, la actuación de Schumacher en Barhein fue vista desde Italia de muchas formas diferentes. Unos se esperaban más de él, a otros aún les duele que haya dejado Ferrari, la que era su casa, una parte ya de él, y otros han visto su regreso y su actuación la pasada carrera, como un resultado normal viendo el coche actual que lleva, que no es el Brawn de Australia de 2009, y reconociendo que la adaptación al regreso forma parte de un proceso.

"Trabajamos duramente para poder cazar a los que tenemos ahora delante. Hay algunas reglas nuevas, y todos tenemos que aprender a manejarnos con ellas. He de reconocer, eso sí, que he de luchar un poco para arreglarme con ellas", confiesa el alemán, quien aún ve que la situación técnica actual no se rige del todo según su gusto. Adaptación, pues, es lo que sabe Schumacher que necesitará.

"Creo que después de 3 años es normal que he de encontrarme paso a paso. El equipo y yo tenemos que trabajar en ello", prosigue el Kaiser. "Me he divertido mucho", puntualiza, "sobre todo la salida, pues estuvo muy ajustada con Nico".

"Creo incluso que nos tocamos ligeramente. Mientras esto pase con compañeros de equipo, lo encuentro bien. No fue nada serio". "Después de eso, todo funcionó según lo planeado. La única sorpresa fue que las gomas duraron más de lo que pensamos. Había contado con un escenario más complicado, y pensé que los neumáticos se degradarían antes". Y es que el sábado, después de la crono, tanto él como Rosberg ya advirtieron que la subida de temperatura sobre todo al medio día, no favorecía demasiado al cuidado de sus gomas.